Seguimos con el ciclo de Stanley Kubrick y ahora nos vamos con su segunda película que bien podría ser la primera. ¿Razón? La primera, Fear and Desire fue casi borrada del mapa por el propio director.
Fear and Desire fue el primer film de
Kubrick. De temática bélica. Según él, quedó tan horrorizado de su producto al rodar su film más serio,
Atraco Perfecto, que buscó todas sus copias para eliminarla de la faz de la tierra. Sin embargo alguna copia queda por ahí pero de muy difícil localización. Yo al menos no he podido verla, así que si algún valiente ha sido capaz de encontrarla, que me lo haga saber porque me haría muy feliz aun sabiendo que se trata de un bodrio. Pero amigos, un bodrio en manos de
Kubrick ¡debe ser un bodrio de oro!
Con respecto a El Beso del Asesino, Kubrick pudo rodarla poniendo dinero de su bolsillo y parte de ganancias de Fear and Desire aunque no fue gran cosa. Un presupuesto de 40.000 dolares fue el resultado de éste film que nos habla de un boxeador en su peor momento, el cual observa con atención a su vecina, hasta que ve como es atacada por su propio jefe en su casa. Así la relación entre ambos se enlaza y deciden huir a pesar de no contar con mucho dinero. Sin embargo el jefe y los matones de la empresa donde trabajaba la chica, se encargarán de hacérselas pasar canutas hasta llegar a un punto final en el film con una persecución y una lucha en una fábrica de maniquíes.
Bueno, hablemos del film por partes. Hablemos de lo negativo. En primer lugar, como argumento, es claramente una fatalidad. Curiosamente es el único argumento donde Kubrick escribe íntegramente el guión, demostrando así que lo suyo no era escribir sino filmar. La duración de éste es corta, 67 minutos. Le fueron añadidos algunos cortes nuevos para llegar a esa duración y no convertirse en un simple cortometraje por lo que el maestro tuvo que rodar algunas escenas como la de la bailarina que no entraba dentro del film. Estas escenas son innecesarias ya que no enriquecen la historia, y es que el film es sin lugar a dudas pobre. El final de la película, la guerra a muerte entre los dos protagonistas en el taller es sin duda hilarante. Algunas partes coreografiadas son más de baile que de pelea. Llegan a cansar y no son para nada creíbles, sobretodo llevando uno de ellos un hacha en la mano...
Hablemos de lo bueno. Si ya hemos dicho que
Kubrick no era bueno escribiendo, es porque su pasión total era la visualización e imagen. Algunos planos del film son de pura fotografía. Sin duda insuperables y muy superiores a su época. El maestro sentía debilidad por crear mundo a través de la cámara. Era capaz de crear sin necesidad de libreto, y es por eso que en sus siguientes películas y sabiendo de ésto, se dejó llevar por los guiones y libros de otros, donde el solo retocaba lo que quería, quedando así la visión perfecta del director. Hay planos como cuando la chica vuelve a casa y la cámara recorre toda la calle asfaltada y sin asfaltar que nos recuerda a tomas de
Kubrick que hemos visto en otras películas suyas como
La Chaqueta Metálica o
Atraco Perfecto. Esa imagen del protagonista mirando la pecera y la cámara tras el, no solo le daban su toque, sino una linea noir que era lo que
Kubrick pretendía. Y es que
El Beso del Asesino es un film negro en toda regla, a pesar de su pobre argumento.
Otra cosa a valorar y tremenda es el uso de contar la historia a base de flashback, ya que el protagonista empieza en el andén de una estación de tres y ahí comienza la historia retrocediendo en el tiempo mientras la cuenta para nosotros. Lo curioso es que dentro de esos flashback hay otros que nos llevan a un retroceso de la historia anterior. Sin duda, un sello que el maestro quiso imprimir por el año 55. Hace bastante...
Y hay más. La fotografía es de la mano de Kubrick también. Es exquisita. Hay momentos como el propio combate de boxeo, donde parece que se dan "leña" de verdad. Fue capaz de rodar sin permisos en la misma calle y los planos como los de la paliza al manager, donde solo se ven siluetas negras, le dan un toque perfecto para hacer de éste un autentico film noir.
Como vemos, por peso cae más lo bueno que lo malo. Pero es cierto que ver una película de argumento trillado y pobre, tampoco es que haga mucha gracia. De seguro, si el film no fuese dirigido por Kubrick, habría caído en el olvido, pero como no ha sido así, los amantes del director podemos recrearnos en todos sus detalles y ver que de una obra tan pobre, es capaz de realizar escenas de quitar el habla.
Como dato, la bailarina fue la primera mujer de Kubrick, Ruth Sobotka, una Austriaca que era decoradora de escenarios en las primeras películas del director.
La recomiendo a todos aquellos que adoren el cine de éste genio, que para mí no solo es importante sino que es el mejor director que ha habido y habrá. De lejos es la más mala de sus obras, pero el simple hecho de ver esos planos de cine auténtico, ya es una cuestión de sobra para hacerlo.
Lo mejor del Film: La cámara. Los Planos. El Love Theme. Stanley Kubrick.
Lo peor del Film: El argumento, los actores, su duración.
Calificación: 7/10
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.