"CAROL ANNE, ¡CONDÚCENOS HACIA LA LUZ!"
¿De qué va?
Carol Anne está pasando una temporada en la ciudad con unos familiares en un edificio diseñado por su tío. Sin embargo, el otro lado la encuentra, por lo que aquel lugar se convertirá en un infierno para ella y los demás.
Reparto
Heather O'Rourke es Carol Anne
Tom Skerritt es Bruce Gardner
Nancy Allen es Patricia
Lara Flynn Boyle es Donna
Zelda Rubinstein es Tangina
Nathan Davis es Kane
Dirección
Gary Sherman (Se busca vivo o muerto)
Impresiones
Tras el descalabro de lo que fue su infumable segunda entrega, no era difícil superar semejante esperpento cuyo final parecía sacado de las ilusiones ópticas de un gato fumado. Sin embargo, el cierre de la "trilogía maldita" no fue para gusto de todos y muchos tacharon de sobrevalorada ésta obra que fácilmente podría converger con El coloso en llamas al trasladar su suspense a ese edificio que regenta centro comercial, galería, restaurante y viviendas. Todo un conjunto que hace fácil su realización sin necesidad de exteriores y que a decir verdad, funciona.
Sin embargo, fue el paso de los años lo que sentenció a la película -aunque a un grupo reducido, entre los que me incluyo, les fascina- al nivel casi del olvido de no ser por la trágica muerte de la pequeña Heather O'Rourke, nuestra Carol Anne, -en ésta ocasión respetan su nombre original en el doblaje- que protagonizó las tres entregas. Con tan solo doce añitos nos abandonaba la pequeña rubia de ojos azules que apuntaba maneras desde su inicio. Ya a comienzos del rodaje de la tercera entrega, comenzó a sufrir extraños síntomas por lo que su madre la llevó a varios especialistas con un mismo resultado: gripe. Sin embargo, lo que de verdad le ocurría interiormente no se descubrió hasta su muerte, todo fue debido a una estenosis intestinal que le oprimió por completo estrechando sus organos. Aunque la película fue completamente rodada, se cuenta que los productores no habían quedado del todo conformes con el final, por lo que tuvieron que rodar nuevas escenas, pero para entonces O'Rourke ya había desaparecido, de ahí que no veamos su rostro en la escena final cuando acaba en brazos del personaje de Nancy Allen.
El final de la trilogía puso la guinda a lo que fue una saga maldita para muchos como ya hemos comentando en nuestro ciclo, debido a las muertes de algunos de sus protagonistas desde la primera entrega hasta la última. Sin embargo, y volviendo a referirnos a la cinta de Gary Sherman, Poltergeist III, hay que destacar ciertos aspectos que me gustaría no saltar por alto, ya que la película, a mi modo de ver, está infravalorada y ofrece un divertimento absoluto.
Poltergeist III es una locura llevada al extremo. No es mejor que la primera, obra de culto, pero sí que me divierte un punto más. En ésta no hay mucho sentido para lo que ocurre, pero no le hace falta ya que está tan bien realizada que eso es lo que menos importa. Sus efectos especiales y ópticos son fantásticos. El momento de los espejos no es más que una razón simple para demostrar que estamos ante una cinta cuidada que no hace más que hundir el fétido final pobre y mal realizado de la segunda entrega. Sus idas y venidas de olla como la escena de los coches en la nieve, puede resultar patética o incluso sacarnos de la película, pero también puede ser que nos impacten lo necesario como para comprender que estamos ante un divertimento que supone una cinta efectiva. Es cierto que para muchos se alejaba del espíritu de la trilogía, pero a mi modo de ver, la revaloriza. Con el tiempo nos hemos dado cuenta que muchas cintas de terror de hoy como Insidious han bebido directamente de ésta parte por sus viajes y saltos de lugar en un mismo sitio y tiempo.
Zelda Rubinstein vuelve a repetir y su rol vuelve a ser un pilar fundamental aunque sea de forma secundaria. De hecho, la escena en la que se convierte en muerta y de su interior sale la actriz Lara Flynn Boyle es de esas imágenes que difícilmente se olvidan y que no hacen más que mostrar su buena mano en el apartado de efectos visuales. Por otra parte, el trabajo de Tom Skerritt y Nancy Allen -nuestra querida Lewis de Robocop- está a la altura, tomando el testigo de Craig T. Nelson y JoBeth Williams. En resumidas, Poltergeist III es una cinta que será amada por un reducido público por su locura pero cierra con acierto la saga, convirtiéndose en todo un In Memoriam para todos aquellos que fallecieron a lo largo de su estreno, sobre todo de la pequeña Heather O'Rourke. Descanse en paz. ★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.