"¿CUANTO VALOR SE NECESITA PARA ABANDONAR A UN HIJO?"
Ted Kramer regresa un buen día a casa tras una jornada de trabajo. Con ilusión en su mirada por un nuevo proyecto, se encuentra con una sorpresa de parte de su mujer, Joanna. Va a abandonarlo, tanto a él, como a su hijo Billy. Aunque Ted cree que se trata de un simple berrinche, Joanna no dará señales de vida durante bastante tiempo...
Dustin Hoffman es Ted Kramer
Meryl Streep es Joanna Kramer
Justin Henry es Billy Kramer
George Coe es Jim O'Connor
Jane Alexander es Margaret Phelps
JoBeth Williams es Phyllis Bernard
Robert Benton (En un lugar del corazón)
Basado en una novela de Avery Corman, adaptada en guión y llevada a la gran pantalla por Robert Benton. Una película que causó sensación en su momento y logró la cifra de cinco estatuillas en los premios Oscar. Probablemente con cierta controversia por haber desbancado del trono a Apocalypse Now. Fuera de polémicas sobre si fue un "robo" o no, no cabe duda que Kramer contra Kramer es una película demoledora. Si bien podría ser que a día de hoy funcionara como telefilm, por lo que cuenta, que en resumidas es lo que narran las películas de sobremesa de hoy, queda claro que la cinta guarda una energía considerable que la aleja de ese tumulto de trabajos infumables para televisión, sobre todo por el trabajo de los actores.
Aunque fue concebida para ser protagonizada por Al Pacino y Jane Fonda, finalmente fueron Dustin Hoffman y Meryl Streep los elegidos como el matrimonio Kramer. El pequeño Justin Henry sería Billy. Fue la primera película del pequeño y a decir verdad, sorprendió por su naturalidad y no caer en la repelencia, como muchos de los niños primerizos en el cine. Curiosamente, Henry fue nominado al Oscar, pero fueron sus progenitores en la ficción quienes se lo llevaran. A lo largo de los años se ha hablado mucho sobre ésto ya que fue el primer Oscar que levantaría Streep y desde entonces no ha parado en ser una firme candidata, pero a decir verdad, su papel aquí, aunque muy bueno, es cuestionable sobre si era merecedora del galardón por su poco tiempo en pantalla -aunque casos más reducidos se han visto-. Queda con ésto clarísimo que quien se come la pantalla es Dustin Hoffman en el papel de un hombre que solo se dedica a su trabajo y que tras ver trastocada su vida por la marcha de su esposa, debe convertirse en un hombre multitrabajo, dedicado a su empleo y a la vida de familia más que nunca, haciendo labores que nunca antes había hecho, como preparar el desayuno o llevar al pequeño al colegio y posteriormente recogerlo. Éste cambio hará mella en él de forma que cambiará la forma de ver la vida pero sobre todo, se verá trastocada la relación con su jefe, interpretado por George Coe, quien trata de absorberlo lo máximo posible.
El tema de la película sigue vigente hoy día, matrimonios que se separan e hijos de por medio. Sin embargo, se le da una vuelta de tuerca al ser ella la que abandona a los suyos, pareciendo la mala de la historia. Una mujer que decide marcharse porque siente que le falta algo y que su labor no es la de ser madre al menos por ahora, es la cantinela que hemos escuchado en decenas de películas o incluso puede que en la vida real, ganas de disfrutar y probar cosas nuevas para encontrarse a sí mismo/a. Todos estos detalles se sumarán en una de las mejores escenas del film, el juicio, donde el espectador comenzará mentalmente a pensar y dividirse hacia un lado o hacia otro.
Curiosamente, el póster original de la película es una fotografía de la familia feliz cuando lo que encontramos es un drama en toda regla. No sería lo mismo de no haber un niño de por medio y esa es la principal baza, porque a fin de cuentas, es una criatura que necesita de un padre y una madre, y ahí es donde el personaje de Hoffman muestra más madurez, porque sabe que lo suyo es una obligación como padre, por lo que decantarse a favor del lado de él es más lógico. En resumidas, Kramer contra Kramer es una película dura, de sentimientos profundos y que nos cuenta una realidad brutal, magistralmente interpretada. Uno de esos clásicos instantáneos que no envejecen aunque tampoco se vislumbre como obra maestra, pero sí que merece la pena. ★★★★★
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.