"VAMOS COBARDE, INTENTA VENDERME ALGO"
¿De qué va?
Vincent es un hombre malhumorado, dejado de la mano de Dios, que por suerte o desgracia acaba "cuidando" del hijo de su nueva vecina. La unión de ambos solo podrá llevar a dos caminos, o la mejora de Vincent como persona o el hundimiento del pequeño.
Reparto
Bill Murray es Vincent
Naomi Watts es Daka
Melissa McCarthy es Maggie
Jaeden Lieberher es Oliver
Dirección
Theodore Melfi (Winding Roads)
Impresiones
Bill Murray en estado puro en una película que le viene como anillo al dedo por su característica unión con su personaje, Vincent. Siempre hemos sabido que Murray tiene una forma de ser bastante peculiar y por eso le atribuimos el mérito a la cinta de los Weinstein, la cual ha recibido aplauso por la crítica e incluso algunas de las nominaciones más importantes en los Globos de Oro. Junto a él, un reparto bien llevado donde destacan la siempre notable Naomi Watts, en ésta ocasión con un acertado acento ruso y junto a ella, Melissa McCarthy, que por primera vez se despega de su vis cómica para ofrecernos un papel dramático a la altura, y además convence.
Sin embargo, no hay que echar las campanas al vuelo ya que si de algo peca St.Vincent es de exceso de dulzura y blandinguerío. El transcurso de la historia abandona el gamberrismo para representar los valores de la humanidad mediante un crío que trata de hacer ver al mundo que su vecino malhumorado es un santo -de ahí el título-. Todo se desploma cuando hay un niño de por medio, aunque por suerte, el pequeño Oliver (Jaeden Lieberher) no resulta cargante como otros, por poner un ejemplo, el impertinente Thomas Horn en la horripilante Tan fuerte, Tan Cerca.
Murray está impecable, no hay duda en ello, pero podríamos haber exigido más a una película que tenía las puertas abiertas a deleitarnos con otra evolución. Theodore Melfi ha ido a lo fácil -recordemos que el guión también está escrito por él- y el protagonista cínico, adicto a las carreras de caballos y al alcohol, se desploma en su segunda mitad junto al resto de la película. Aun así, es una cinta amena y a ratos divertida, un lucimiento para Murray que gustará a sus detractores. La banda sonora de Theodore Shapiro se adapta a la perfección junto al conjunto de canciones seleccionadas, por lo que en resumen, tenemos una comedia justita pero aprobada, de ser más gamberra, habría sido un acierto. ★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.