James Foley continua con la historia del congresista Underwood. En éste caso sus redes se extienden de forma maestra para realizar algunas jugadas de auténtica destreza profesional.
Nos encontramos ante un episodio maestro que probablemente tenga demasiada información para el espectador habitual, pero que pensándolo con calma, resulta brillante. Una vez esclarecido todo, conociendo cada personaje y acción llegaremos a disfrutar de cada idea salida de la cabeza del personaje de
Kevin Spacey, Frank Underwood.
En éste episodio se abren nuevas vertientes que harán explosión en breve. Por una parte, Peter Russo, que cada vez me gusta mas, tiene una encrucijada al encontrarse con la dificil tarea de eliminar empleos al cerrar el astillero del distrito. ¿La razón? Underwood tiene entre manos otro plan maestro para chantajear a uno de los candidatos para conseguir votos. Para ello trasladará el dinero de los astilleros a la base aerea y asi ganar el favor de los electores negros que son nada menos que diez.
Todo ésto se debe a la negativa a aprobar el libreto sobre la educación que Frank "redactó". Por eso jugará con el Jefe de la Cámara, quien se opone. Frank simplemente tendrá que jugar sus cartas como bien sabe.
Pero tras todo éste tejemaneje parece que la relación entre el matrimonio Underwood comienza a tambalearse. Claire estalla al verse presionada en su propio trabajo al no poder optar por una buena suma de dinero que le haría aumentar la empresa. Sin embargo su marido la obliga a hacer lo contrario para evitar el contacto con el "enemigo". Estando en dos campos diferentes y comprobando en su piel una vez mas que su esposo actúa mas como empresario que como marido, dedicado mas a su trabajo.
Así pues, Claire acaba llamando a su exnovio con el que queda en la habitación de un hotel...
La reacción de ella resultará de alivio para mas de uno. Sin embargo, Frank Underwood, que siempre roza entre la maldad y la bondad (más lo primero que lo segundo), acabará el episodio haciendo lo que su mujer no ha sido capaz y con ellos nos prepararemos para lo que desencadenará en breve en los siguientes episodios.
¿Hace falta decir algo mas? Brillante!! Que maravilla de serie.
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.