"ÉSTE ES EL ÚLTIMO AÑO QUE PUEDA SER YO MISMA"
¿De qué va?
Alice es una reputada profesora de lingüística con un trabajo sobre las neuronas. Un buen día, en mitad de un discurso, pierde el hilo por unos segundos, pero esto irá incrementándose y del mismo modo, asustándola. Y es que Alice, aunque es joven para tenerlo, sufre de alzheimer
Reparto
Julianne Moore es Alice
Alec Baldwin es John
Kristen Stewart es Lydia
Kate Bosworth es Anna
Dirección
Richard Glatzer, Wash Westmoreland (La última aventura de Robin Hood)
Impresiones
Nos encontramos ante
una cinta de TERROR con todas las letras. Still Alice, es una película
incómoda, dura, triste. La cercanía de sus hechos harán que nos sintamos compungidos, sobre todo por la maravillosa actuación de su protagonista, Julianne Moore, que es capaz de sembrar el pánico entre los espectadores en apenas segundos. Está muy bien secundada por
Alec Baldwin, Kate Bosworth y sorprendentemente bien por
Kristen Stewart. No obstante, es
Moore quien se lleva la palma y quien tiene todas las papeletas para ser nominada al Oscar y llevarse el Globo de Oro. Ha realizado dos papelones a lo largo del año, éste y su histriónica diva en
Maps to the Stars de
David Cronenberg. Solo por eso, le damos el galardón con los ojos vendados.

Still Alice nos presenta desde su inicio el principio de la enfermedad, poco común por su edad pero existen casos prematuros. En mitad de un discurso, pierde el hilo de lo que estaba diciendo pero logra retormarlo y salvar el paso. Pero poco a poco se incrementará su terror cuando olvide palabras, se pierda en la ciudad y no recuerde donde está la puerta del baño. Sabe que su hora se acerca y no quiere que eso ocurra. Sin invadir el terreno del spoiler, hay que declarar que todas las escenas que rodean a Alice son tan cercanas que no solo sentiremos lástima por ella, también por su familia.
Solo hay que pensar fríamente y recordar si alguna vez no hemos olvidado algún punto de la conversación en la que estábamos metidos, o algún nombre que no nos salía en ese momento. Fue en su comienzo cuando comencé a pensar y dije: lo que le pasa a ella, a mi me ha pasado también. Por suerte y para calma de todos, John (Baldwin), nos recuerda que a todos se nos olvidan nombres alguna vez y nos perdemos, pero lo que le ocurre a Alice, es mucho más grave, va más allá y se incrementa con el paso de los días.
Dentro de que para muchos pueda ser realista o no, hay que decir que dentro del alzheimer hay diversas patologías que pueden ser tratadas de una u otra forma. En el caso de la de Alice, no solo es temprana sino que es hereditaria, existiendo una probabilidad de que sus hijos la tengan a un cincuenta por ciento. De ahí que la gravedad del asunto salpique más aún, entre otras cosas porque de seguro conocemos casos cercanos de gente -en su mayoría anciana- que tiene la enfermedad.

La banda sonora es un aspecto muy positivo en la obra. Ilan Eshkeri crea un leitmotiv de cuerdas muy dramático pero hermoso a su vez, que se repite constantemente y ayuda a padecer con más tristeza el síntoma de Alice. Una Alice que como ya hemos dicho, está impresionante. Y aunque la película no sea ninguna obra maestra, porque no lo es y guarda ligeramente su corte independiente, duele y emociona. Julianne Moore inconmensurable, magnífica, brillante. Solo hay que verla y deleitarse en su actuación y echar alguna que otra lágrima y dejarnos helados en algunas de las dolorosas escenas y otras tan profundas como la de su discurso final sobre la enfermedad que tiene. No hay palabras. ★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.