"EN LOS PRÓXIMOS AÑOS, EN LOS MOMENTOS MÁS PRIVADOS, QUIERO QUE RECUERDES AL ÚNICO HOMBRE QUE TE DERROTÓ"
¿De qué va?
El Joker ha reaparecido de forma mortífera. Siguiendo su rastro, Batman y Robin tratan de atraparlo, sin embargo, Ellen Yindel, la nueva comisaria, ha puesto en busca y captura al hombre murciélago. A su vez, Superman libra una guerra en la isla de Corto Maltés, aunque finalmente tendrá que darle caza a su viejo amigo por orden del presidente de los Estados Unidos.
Reparto
Peter Weller es Batman/Bruce Wayne
Ariel Winter es Robin/Carrie Kelley
Mark Valley es Supermán/Clark Kent
Michael Emerson es Joker
Maria Canals es Ellen Yindel
David Selby es Gordon
Dirección
Jay Oliva (El Regreso del Caballero Oscuro Parte 1)
Impresiones
Si hablábamos alabanzas de la primera entrega de
El Regreso del Caballero Oscuro por
Jay Oliva, basándose en la historia de
Frank Miller, podemos hacer lo mismo con ésta entrega por asumir el riesgo de plasmarla en la pantalla. Antes de nada, hay que aclarar para aquellos que no hayan seguido el cómic, que ésta segunda parte no tiene nada que ver con
El Contraataque del Caballero Oscuro, secuela que
Frank Miller creó a comienzos del dos mil y en la que al autor se le fue la "olla" completamente. Ésta segunda parte sigue siendo del primer libro, cerrando así una perfecta aventura en dos entregas para mejor comprensión y disfrute. De cualquier modo, si existiera alguna cinta animada en el futuro basada en
DK2, de seguro que no sería muy cuerda aunque sí violenta.
Volviendo al tema, ésta segunda entrega, estrenada un año después (directamente al formato casero) se basa en los dos subtomos finales del libro: "A la caza del señor de la noche" y "La caída del señor de la noche". En ellos, Joker resurge y Robin ya está entrenada como tal en su afán por acompañar al envejecido héroe. Podemos destacar muchas cosas de ésta entrega, recordando que cada tramo está fielmente adaptado en la pantalla por lo que el disfrute será mayor. Por una parte, después de que Joker despierta de su estado catatónico, notamos la oscuridad que se cernía sobre el autor a la hora de continuar el relato, al ver como el eterno villano se terminar de romper el cuello por sí mismo con tal de que culpen a Batman. También hay sangre ya que el héroe es herido de gravedad por su némesis.
Pero la parte más curiosa es la política, un tema que siempre ha fascinado a Miller y donde se ha metido en camisa de once varas muchas veces (véase Holy Terror). Aquí, nos presenta a un Superman dominado por el presidente de los Estados Unidos, un Ronald Reagan de aspecto terrorífico, que está en guerra contra los sovieticos. Recreando una guerra por una isla ficticia, Superman accede como perro obediente y acata una última orden, la de dar caza a Batman, su viejo amigo, para evitar un "descontrol" de mando en la sociedad. De ésta forma estalla una curiosa reflexión por parte del caballero oscuro, cuando habla con el hombre de acero, recordándole que en cierto modo, todos son villanos, con la excepción de que Superman tiene jefe. Así llegaremos al tramo final, un éxtasis para el lector y el fan, que de cierta manera se ha querido explotar en la venidera cinta de Zack Snyder, Superman Vs Batman Dawn of Justice ya que la escena del encuentro (visto en la Comic-Con 2014) y el traje que el murciélago lleva, recuerda al inventado por Miller en ésta historia.
Frases míticas se dan continuamente y escenas que dejarán la boca abierta. ¿quien decía que Supermán no podía ser derrotado por Batman? De hecho, no es el primer cómic en el que ocurre. En Silencio (Hush), el héroe nocturno le arreaba una paliza al colocarse un anillo de kryptonita, pero eso es otra historia. Por otra parte, aunque es una misma historia, al estar dividida en dos partes, hay que reconocer que ésta tiene un poco más de surrealismo que el vivido en la anterior entrega. Los ayudantes de Joker, un Batman disfrazado de anciana, una villana con el pecho al aire y las esvásticas en sus pezones, el politiqueo y el encuentro, digamos "absurdo" aunque excitante entre Batman y Superman, resulta un bajón comparado con la cercana y realista primera parte. Aun así, es una historia brillante que cierra un magnífico cómic, una obra maestra del noveno arte que no podéis dejar escapar y que ahora podeis disfrutar en animación. La banda sonora, vuelve a ser de Christopher Drake, realizando una composición perfecta aunque algo menor con respecto a la primera entrega donde explotaba un tema principal brillante que aquí es prácticamente inexistente. Lo dicho, disfruten porque no existe adaptación mejor.
PD: Y pensar que hace años se barajó la posibilidad de realizar una película sobre ésta historia y que Clint Eastwood fuera su protagonista.... ¡madre mía lo que habría sido! ★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.
