"TARZÁN SIGNIFICA SIMIO SIN PELO"
¿De qué va?
La expedición Greystoke va tras la búsqueda de un meteorito gigante en mitad de la jungla sin embargo, su helicóptero acaba destrozado. El pequeño J.J Greystoke será rescatado por Kala, una gorila que acaba de perder a su hijo y le dará la misma crianza hasta que pasen los años y éste se convierta en Tarzán.
Dirección
Reinhard Kloos (Animals United)
Impresiones
De seguro, Edgar Rice Burroughs debe de estar revolviéndose en su tumba ante semejante despropósito. Ésta nueva adaptación de su obra bebe directamente de las fuentes originales como Greystoke: La leyenda de Tarzán o incluso de la infumable Tarzán y la Ciudad Perdida de Casper Van Dien. A ésto se le une una historia "fantástica" que comienza con el Big Bang, un meteorito que extinguió a los dinosaurios pero que se plantó en plena selva para que fuera custodiado por simios guardianes. El director de semejante patraña es el alemán Reinhard Kloos, creador de otras cintas animadas en su país y experto en hacer plagios baratos como Animals United, un calco descarado y pobre de Madagascar.
Sin embargo, si nos alejamos de la historia y su fantasía, donde en el mundo de la animación todo es válido. ¿Qué podemos decir de su calidad? Pues mucho, pero casi nada bueno. Es curioso que una cinta así haya conseguido distribución con la inmensa cantidad de títulos independientes que merecen la pena y nos llegan directos al formato casero, y con suerte. Y es que ésta nueva versión de Tarzán tiene un diseño muy pobre. Las facciones, expresiones y actividad son totalmente ortopédicas. Lo vemos desde primera hora, con la primera imagen. Lo encontramos en los robóticos movimientos de los gorilas, en la nula gesticulación de sus personajes y en algunas incoherencias y aspectos que no solo desentonan sino que terminan por fulminar la obra. Por ejemplo, el pequeño J.J. Greystoke sabe hablar a la perfección. Cuando crece y se encuentra con Jane, parece que se le ha olvidado no solo el idioma, sino el pasado con sus padres reales. Es ruborizante el momento Ozzy Osbourne, al igual que el sinsentido de la canción Paradise de Coldplay casi en formato videoclip. ¡Y que decir de la "pedrada" final en la que Tarzán levanta una considerable piedra para mandarla a kilómetros y estrellarla contra el helicóptero del villano!.
Por hacer una pequeña comparativa, tenemos el caso de Beowulf de Robert Zemeckis, cinta, que al igual que su anterior trabajo, Polar Express, le fue achacada una falta de expresividad en sus rostros muy notable. Ni siquiera es equiparable, ya que ambas son prácticamente obras maestras al lado de ésta mezquindad de la que aun me pregunto qué me habrá llevado a interesarme por ella. Si señores, hoy hay videojuegos con unas introducciones y cinemáticas que se meriendan a ésta cinta. Ni que decir ya de los pesados planos en los que la cámara nos muestra al personaje ya sea levantándose o poniéndose en cuclillas. Podría parecer que es sacarle los tres pies al gato, pero es que está así de mal dirigida.

¿Qué podemos salvar de ella? Su banda sonora. No sabemos como habrán enredado al hermanísimo de Thomas Newman, David, para hacer el score, pero el resultado es sin duda lo único resaltable ya que el uso de la orquesta es brillante y el tema principal, aunque recuerda a otras obras conocidas, funciona perfectamente, eso sí, mejor fuera que dentro de la película. En resumidas, siempre hacemos críticas de todo, para recomendar y para ayudaros a elegir. En éste caso, os recomendamos evitar semejante producto. Ni siquiera es válida para enseñar a los niños. Si de verdad queréis una cinta divertida sobre Tarzán, la de Disney sigue siendo la mejor opción.★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.