Stanley Kubrick, el mejor director del mundo, se jugó el tipo en los sesenta con la censura al tratar un tema muy peliagudo por aquel entonces y que bien mirado, hoy sigue siéndolo. La atracción sexual que siente un hombre hacia una niña y sus quebraderos de cabeza son la trama principal de Lolita, un film escrito en novela y guionizado para el film por Vladimir Nabokov.
Por supuesto, Stanley Kubrick tuvo que reorganizar el guión para que el film no fuese cortado de lleno en vista del contenido. Pero era bien sabido que quedó totalmente enamorado, sobretodo de la primera fase del guión que tenía contenido para nueve horas de duración. Sin embargo y en vista de la censura tuvo que evitar aspectos y detalles muy importantes. Por ejemplo, en la novela se narra a la perfección el origen del protagonista interpretado por James Mason, Humbert. Se menciona como su primera novia de doce años acabó muerta, por lo que éste coge un grave trauma y una obsesión con las niñas de esa edad. Es por ello que el momento y la primera escena en la que Humbert ve a Lolita en el Jardín, él no se enamora, sino que se obsesiona.
El increible y majestuoso comienzo del film con un Peter Sellers apoteósico y un brillante James Mason.
Y precisamente ese es el aspecto que la mayoría de espectadores no entiende. En ningún momento el personaje principal siente amor hacia Lolita, es sencillamente una obsesión persistente que le obliga a hacer todo lo posible por estar a su lado. Sabiendo éste dato, nos daremos cuenta de que las reacciones de Humbert son más lógicas aunque no correctas de una persona normal. Es por eso que hay muchos análisis sobre el estado patológico de éste personaje en muchos medios.
Eso era lo que a Kubrick le llenaba, la búsqueda de personajes con problemas y sobretodo obsesiones. Lo podemos repasar en toda su carrera fílmica y no fallamos. Pero el film que para algunos puede resultar el más aburrido de su carrera tiene algunos detalles a analizar que le dan una riqueza suficiente para tenerla entre las grandes.
El comienzo de la novela empezaba directamente desde el momento en el que Humbert busca alquiler, pero el film sin embargo comienza cuatro años después cuando el protagonista busca a Quilty (Peter Sellers) para asesinarlo. ¿A que se debe el cambio? Pues gracias a la maestría magistral de la perfección llamada Stanley Kubrick, sabemos que el maestro decidió cambiarlo no solo para llamar la atención sino para que el espectador estuviese desorientado y expectante. Según Kubrick, si leíamos la novela, el lector espera impaciente el momento en el que Lolita y Humbert llegan al acto sexual, y a partir de ahí la novela perdía todo su interés y morbo. Es por ello que el director decidió empezar con el asesinato de Quilty para que estuviésemos esperando las razones del suceso. Simplemente magnífico.
Pero quizás el detalle mas brutal lo encontramos precisamente en esa escena, en la que tenemos que decir que luce fantásticamente
Peter Sellers, actorazo como los que no hay hoy y donde le demostró al director de su valía para contar con el en su siguiente film,
¿Telefono Rojo? Volamos Hacia Moscú. Y el detalle al que me refiero es sin duda la explicación mas contundente de lo que es el film a través de un disparo. En el momento en el que herido, Quilty huye, se refugia tras un cuadro enorme donde la pintura es la de una niña de época posando. Seguidamente, Humbert dispara a través de la pintura, hiriendo y matando a Quilty estando en medio ella, la niña. Creo que sencillamente no hay palabras. Ahí está toda la base del film y su descripción es absoluta.
Los actores están perfectos y la elección de la joven Sue Lyon es para mi gusto perfecta y de una belleza exquisita. Una niña bellísima que aunque para el film tenía que contar como si tuviese 14 años, por la censura, ya que el libro la muestra con 12, ella realmente tenía 16 por aquel entonces.
Lolita (Sue Lyon) radiante, y Quilty (Sellers) observandola.
James Mason por su parte está muy bien y refleja perfectamente su obsesión en cada escena, donde una vez más recordamos que aquello no era amor, sino una enfermedad. Lolita era su remedio. Aun así aunque reconozco que lo borda, no es uno de mis actores favoritos.
La música corría a cargo de Nelson Riddle y su tema principal es sencillamente bellísimo.
En resumidas, un film donde no hubo en comparación a otros, grandes altercados aunque siempre hay anécdotas. Y si no tenemos ni idea de lo que va Lolita, simplemente tenemos que ver sus créditos de inicio. Ese erotismo queda impregnado en la pantalla desde el primer enfoque. Kubrick era Kubrick, osea, un genio.
Lo mejor del Film: Absolutamente todo el conjunto de actores. La obsesión. Su desarrollo. Su música.
Lo peor del Film: Que el director no hubiese podido mostrar ni ser más explícito por la época en la que se estrenó, ya que éste hecho hizo dudar a muchos sobre las actitudes reales del protagonista. Es la que peor fotografía tiene de todas las obras del Maestro Kubrick.
Calificación: 9/10
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.