WHAT HAPPENED AND WHAT´S GOING ON
El entierro de Beth es el punto de partida para ir a las afueras de Richmond, Virginia. Era el lugar donde ella y Noah iban a ir tras su salida del hospital. Deciden parar tres kilómetros antes para ir a pie y observar el terreno con cuidado, sin llamar la atención. Logran dar con la urbanización cerrada, pero la encuentran arrasada por los caminantes, algunas casas quemadas y todo desierto. El chico rompe a llorar, pues allí vivian conocidos y familiares. Mientras tanto, hacen un “barrido” rápido de caminantes y Michonne propone quedarse allí aunque Rick no lo ve claro por estar rodeados por un bosque sin una vista precisa en alto.
Glenn y Rick hablan sobre los días pasados, lo vivido en Terminus y la pérdida de Beth. Noah se levanta parar correr e ir a la que fue su casa. Tyreese va con él y se adentra tomándole ventaja para evitar que lo dañen. Un muerto en el salón y ruido tras una puerta, un quejido infantil que llama la atención del fornido Tyreese. Mientras contempla unas fotos de los niños de la casa, el caminante pequeño se le acerca y le muerde en el brazo. Noah lo aplaca y corre en ayuda mientras el gigante queda sentado sangrando incesantemente. Comienza a tener visiones sobre el hombre que atacó en la casa cuando estaba con Carol, para salvar a la pequeña Judith. La pesadilla se incrementa con la visión de Bob. El gobernador entra en juego, todos le hacen ver que debía actuar y no dedicarse a proteger niños. El gobernador se difumina con la figura de un caminante que lo ataca y éste para defenderse vuelve a hacer uso de su brazo malherido. Las visiones regresan, incluidas Beth y las niñas. El gobernador vuelve a aparecer para mostrarle su debilidad, que se debe rendir, pero Tyreese no piensa hacerlo porque cree que la gente puede vivir, tener una oportunidad.
Tras comprobar en la entrada cercana que hay decenas de cuerpos mutilados y cortados por la mitad, Michonne habla de Washington. Aunque Eugene mintió en la cura, piensa que es un buen sitio para hallar una buena oportunidad. Aunque Rick dice que está lejos, a 150 kilómetros, opina que es un buen sitio para probar. En ese momento escuchan los gritos de Noah, que es atacado por varios caminantes. Al llegar donde Tyreese no muestran contemplación y le estiran el brazo para que Michonne corte rápidamente. Huyen en seguida masacrando a los caminantes que paran en la puerta. En el camino a pie, Tyreese visiona toda la carnicería realizada por los suyos y el ruego de los que ya han muerto por su llegada. Lo meten en el coche pero al arrancar queda atrancado hasta que choca con una camioneta de la que saltan cuerpos mutilados de caminantes, sin extremidades, tan solo el tronco y la cabeza. El camino es largo, pero Tyreese queda en paz, vuelve a visionar a sus protegidos y fallece…
El episodio, que comenzó con el entierro de Beth, se apaga con otro entierro, el de Tyreese, un hombre que lo dio todo por la protección y que no estaba a favor de la batalla… Es Rick quien termina de cerrar su tumba con los últimos montones de tierra.
La semana que viene comenzará una cruzada en la búsqueda de comida y agua, y unos amiguitos peludos que se encontrarán por el camino.
No hay duda que la muerte de uno de los personajes principales nada más comenzar la segunda mitad de temporada (dos fallecidos protagonistas en dos episodios seguidos) ha sido toda una sorpresa, sobre todo porque en éste caso AMC no ha filtrado nada como ocurrió en el caso de Beth, ocasionando un spoiler monumental. Ésta vez han sido cautos, por lo que le agradecemos el detalle. No se si será cosa mía, pero esta muerte no ha causado tanta repercusión en el episodio, a mi personalmente no me ha transmitido nada, aunque no por ello sienta lástima por el personaje, que me caía bien, pero ésta forma de los guionistas de quitarse del medio a Tyreese no me ha convencido del todo. Esperemos que el resto de episodios remonte, porque de momento no le vemos un curso fijo.
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.
