El plan de La Red para
"salvar" el mundo y llevarlo a una utopía sigue su curso y entra en la siguiente fase. La brutal introducción del capítulo nos pone en antecedentes del siguiente movimiento de la corporación.
En un pueblecito de la américa profunda, un padre de familia recibe una llamada nocturna tras la que desentierra un extraño contenedor cilíndrico, lo esconde en el coche y lo abandona en el aparcamiento de un aeródromo. Después vuelve a casa, acaba a sangre fría con su mujer y sus niñas y se quita la vida. Un agente durmiente de una organización que no duda en usar la violencia y la muerte como mal menor para conseguir su "filantrópico" fin. Posteriormente veremos cómo este hecho tiene relación con el vídeo que aparentemente había sacado de su estado semi-catatónico a Anton/Carvel hasta hacerle casi profeta del apocalipsis al proclamar, como si fuese Fernando Arrabal hasta arriba de whisky, que todos iban a morir. Ian decide robar el vídeo para ver qué pudo provocar esta reacción, cosa que conseguirá en una escena muy divertida.
Mientras tanto, Jessica Hyde se ha plantado en casa de Dugdale, la única persona en la que confía y que se ve obligado a secundar los planes de La Red en contra de su voluntad, ya que la organización tiene atrapada a su familia. De esta forma se encuentra en un difícil dilema moral, intentando salvar la vida de la gente que tiene a su alrededor e
"indaga" demasiado en la naturaleza del virus (como vimos en el anterior episodio), pero sin poder evidenciarlo ya que su familia corre peligro. Al menos, encontrará en Jessica un poco de consuelo y alguien con quien poder
desahogarse. La sorpresa definitiva se la llevará Ian cuando acude a casa de Dugdale y encuentra a Jessica. No sólo eso, sino que ésta está sedienta de sexo y parece tener una especial predilección por Ian. ¿O sólo era una estratagema para colocarle un smartphone, más que probablemente a efectos de localización? En todo caso, el joven vuelve a su refugio temporal para encontrarse con que Becky y Grant han han hecho varios descubrimientos con respecto a Anton:
Que habla rumano (lo que da pie a la contratación de un traductor de lo más curioso, y que acabará mal, como era de esperar), que tiene tatuado un número en el antebrazo, lo que indica que estuvo en un campo de concentración y que la modificación que introdujo en Janus es una variable para que el virus sea selectivo con una etnia. ¿Cuál será, conociendo su pasado como (¿judío?¿gitano?) víctima del nazismo? La llegada de Ian con el vídeo de la discordia revelará que lo impactante no es la (absurda) imagen en sí, sino la noticia que circula en la franja inferior: un americano mata a su familia y se quita la vida (haciendo referencia al principio del capítulo). En momentos de lucidez intermitentes, Anton revela que todo empezará con la muerte de cinco familias.
Este hecho será corroborado también en paralelo por Milner, quien pone a Wilson en antecedentes de la siguiente fase de su plan:
cinco durmientes que comenzarán la expansión de la gripe rusa llevando contenedores a pequeños aeródromos que lo fumigarán sobre rutas de alto tráfico aéreo, lo que llevará a la propagación del virus por todo el globo en un tiempo record. A partir de ahí, entraría en juego la vacuna cargada de Janus. El
día V se acerca de forma inexorable y Wilson verá comprometida su férrea moral al cargar con la responsabilidad de ser la persona de confianza de Milner y probar si está dispuesto a hacer lo que haga falta para salvar el mundo, incluyendo ser responsable indirecto de la muerte de cientos de miles de personas, y directo de unas cuantas, entre ellas la del hermano de Ian. Parece que Milner ya ha elegido a su sucesor para ser el Sr. Conejo.
Mientras tanto, Pietre ha conseguido que su nueva familia quede libre de las maquinaciones de La Red, aunque le cueste no volver a verlos nunca más y traicionar a sus compañeros fugados. Solo que se encontrará con una sorpresa inesperada: su padre vive. Tras la sorpresa, se llevará a su padre y a Grant a golpe de pistola, salvando Becky e Ian la vida por los pelos. Estando así las cosas, Milner visita a Dugdale y descubre que miente sobre su relación con Jessica y el resto de fugados, por lo que decide darle pasaporte por la vía rápida. Por suerte, Jessica llegará a tiempo para impedirlo. Para salvar la vida, Milner le confiesa a la chica que su padre sigue con vida.
Las subtramas se siguen enredando y conduciendo a un desenlace cada vez más imprevisible. ¿Un reencuentro de la familia feliz Milner/Carvel/Pietre/Jessica? Pueden saltar chispas... Y mientras tanto, una pregunta sigue flotando en el aire: ¿Dónde está Jessica Hyde?
Por Antonio Santos