Los jefes de Molly descubren la ecografía y recuerdan que ella perdió un hijo esperado con su marido fallecido, Marcus, pero al ocurrir el accidente, no pudo concebir más. Continuarán siguiéndola aunque ella parece confiar en Sparks. Tras esto, volvemos en un flashback al pasado de Molly para comprobar la triste llegada que comunica a John su resultado fértil improbable, por lo que éste le propone otra alternativa, Ethan.
Volvemos al presente. Ethan se queda solo y desobedece una de las normas de John. Abre la puerta tras ver a una paloma e inventa una trampa para cazarla. Luego, Molly recibe la visita de Sparks. Éste le miente y le dice que ella tenía razón y que lo que ha pasado es un experimento de ayuda que anulaba su infertilidad y ha tenido éxito, por lo que el hijo es de ella y su marido. Le recomienda una cuarentena pero ella no accede y regresa a casa.
Es el primer día de escuela para Ethan. Los padres de los niños están preocupados porque “una tostadora con pelo” se vuelva loca y pueda hacer daño a los demás. Molly sale en defensa de su marido y dice que para ellos es su hijo, solo que es un poco diferente. Mientras, Lucy, una nueva inteligencia artificial, sorprende a los trabajadores de la oficina de John. Parece aprender más rápido y es muy inteligente. Julie queda asombrada.
Molly visita la caravana de Harmon Kryger pero no parece estar. Encuentra un extraño dibujo en la pared que la asombra. Le hace una foto para investigarlo y se apresura a recoger a Ethan. En el camino, una furgoneta le hace señales para que pare. Es uno de sus superiores que le devuelve el chip de monitorización, totalmente esterilizado para volver a tenerla controlada. Tras ser comunicado Sparks, éste dice que tratará de traerla por la noche a la oficina.

Los Woods hacen una fiesta de cumpleaños en casa. La doctora aparece para extraerle sangre y comprobar que todo está bien aun en secreto. Al minuto de la extracción, la señal de la pared se refleja en su brazo, al igual que ocurrió en su barriga y se desmaya. Vuelve al espacio, recordando a Marcus y su repetido “Todo está bien”. Minutos después se despeja y regresa a la fiesta. Recibe a Tim, hermano de Marcus. Se alegra de verlo y conversan sobre el pasado. Mientras, Julie le dice a John que no ve que lo mejor sea dejar a Ethan expuesto en el colegio aunque él no piense lo mismo. Tim le comunica a Molly que sigue viendo a su hermano, retransmitiendo un mensaje, que todos estarán bien.
Continua la fiesta de cumpleaños y se va la luz. John comprueba en su cuarto y encuentra una caja que se mueve. Asustado la abre y encuentra a la paloma. Allí está Ethan. “¿Tu hiciste eso?” Se da cuenta que desobedeció e indirectamente le habla de un secreto de su madre. Enfadado sube a la habitación y habla con Molly. Ella le cuenta que está embarazada, que implantaron algo en su cuerpo en pleno viaje y que no se lo dijo por miedo. Él la cree y se emociona por ello pero se da cuenta que su mujer no lo está pasando bien. Ambos se abrazan y prometen superar cualquier problema. Luego bajan y ella suelta su discurso de cumpleaños. Quiere despedirse de Tim pero John le dice que no ha estado en la fiesta. Ella segura, comprueba una foto que se ha hecho a su lado y se da cuenta de que no está. Tras ésto le habla a su marido de la cuarentena al darse cuenta de sus repetidas “visiones”. Marcha con Sparks, quien la espera fuera.
La Doctora Barton vuelve a la oficina pero no la dejan pasar por un tipo de “filtración química”. Ella sospecha y da media vuelta pero lo vuelve a intentar mas tarde sin éxito. Se cuela en las instalaciones por otro acceso y se da cuenta que todos sus documentos y datos están siendo trasladados. Llama a casa de Molly pero John le responde que acaba de irse con Sparks. La llama a su teléfono y le da tiempo a escribirle un mensaje antes de ser detenida. “Sal del coche!” Tras forzar su parada, Sparks comprueba una forma extraña moviéndose en la barriga de ella y para. John la seguía y huye con Ethan y ella. Más tarde, la autoridad registra la casa y la encuentran vacía…
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.