James Bond sigue la pista del magnate Hugo Drax, constructor de una nave desaparecida llamada Moonraker. La investigación lo lleva a diferentes puntos desde Rio de Janeiro, Venecia hasta finalmente llegar al espacio donde descubrirá las verdaderas intenciones de Drax y tratará de pararlo junto a la ayuda de una agente de la CIA.
◘ Actores
Roger Moore (El Santo) es James Bond
Lois Chilles (Muerte en el Nilo) es Holly Goodhead
Michael Lonsdale (Munich) es Hugo Drax
Richard Kiel es Tiburón
Bernard Lee es M
Desmond Llewelyn es Q
Lois Maxwell es Moneypenny
◘ Impresiones
Lewis Gilbert quien levantó la franquicia con su anterior película,
La espía que me amó, devolvió el interés y las ganas a todos los fans para comprobar de que sería capaz en su siguiente trabajo. La respuesta no se hizo esperar y para arrasar se empleó un marketing masiva y una suma de producción que doblaba a los anteriores trabajos. El resultado fue exitoso ya que
se colocó como la cinta mas taquillera de la franquicia hasta que llegó Pierce Brosnan. Pero todo ese "éxito" fue momentáneo por el estreno.
Moonraker es para los entendidos y amantes del ciclo 007, una de las peores películas y probablemente el mayor desastre de las protagonizadas por
Roger Moore.
El desastre posterior se debe a La Guerra de las Galaxias (Star Wars) tras su estreno un par de años antes en 1977. Fue tal su éxito que intentaron hacer que las aventuras de Bond se convirtieran en una especie de opereta espacial al estilo Lucas. El universo Bond siempre roza lo ficticio por su multitud de gadgets y vehículos, pero otra cosa muy diferente es mover todo ello a un ámbito mas surrealista como el que lleva al personaje a hacer un viaje espacial. Y aunque el intento de Drax de eliminar toda la población de la tierra para crear una sociedad con seres perfectos no es mala idea (aunque tampoco es original), el intento de hacerlo desde el espacio y lo que conlleva ésto es en cierto modo vergonzoso. Todo este craso error comienza cuando Bond, estando en Rio de Janeiro llega vestido de cowboy mientras suena la sintonía de los siete magníficos a un cuartel cercano y allí comprueba como hay armas de rayos láser capaz de derretir al contrincante. La película, que había comenzado magníficamente, se desarrolla finalmente con una cadena de desastres que la hacen cada vez mas desastrosa.
¿Hace falta decir que la guerra espacial entre astronautas con sus respectivos lásers parece salido de la cabeza de un niño que acaba de ver Star Wars? "Vergüenza" es una palabra que resume este final. Una escena extensa que no solo convierte la película de acción y aventuras de Bond en una cutre historia de ciencia ficción y donde vemos a un Richard Kiel en el papel de Tiburón que acaba luchando a favor del agente británico. Y es que su papel, a diferencia de en La Espía que me Amó, es mucho mas cómico y acaba convirtiéndose en un villano gafado que siempre tiene a punto de caramelo a su víctima pero que acaba como el coyote en su persecución con el correcaminos. Mas irrisorio resulta ese intento de humor continuo cuando tratan de añadirle al gigante la relación de una mujer pequeñita con coletas a la que se lleva al espacio inclusive. Cuando pensábamos que el humor de los anteriores trabajos se zanjó con la anterior película de Gilbert, nos sentimos engañados al ver ese retorno humorístico mezclado con esa ciencia ficción metida con calzador.
No obstante, tras todos estos percances, errores y defectos hay algunas cosas positivas a destacar como la primera incursión antes de los créditos iniciales donde hay una espectacular escena de saltos en el aire con y sin paracaídas en la que Bond lucha por atrapar a su contrincante y arrebatarle el paracaídas y éste a su vez es perseguido por Tiburón. Incluso todos esos momentos de relación con la agente de la CIA con su tira y afloja y donde parece que es ella quien acaba usándolo a él, son interesantes. Todo lo demás, como ya he dicho, se torna en fatídico e irrisorio.
◘ BSO
John Barry regresa y junto a él y por tercera y última vez, Shirley Bassey, con un tema musical muy apropiado, incluyendo dos versiones, la segunda, mas acorde al tiempo del film resultando mas "discotequera". En lo demás, la partitura es muy apropiada y el autor hace uso del tema principal a su antojo y con éxito, resultando así una de las pocas cosas positivas de éste film tan olvidable.
•Lo Mejor: La escena inicial. El corte musical "Flight into Space"
•Lo Peor: La peor película Bond de Roger Moore
•Calificación: 2/10
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.