Volvemos con el maestro de maestro, director de directores. El mas grande, una vez más. Eyes Wide Shut fue su última obra. Una pena ya que tenía entre manos el proyecto de Inteligencia Artificial que acabó rodando Spielberg.
En el 1999, el film se llenó de gran repercusión. Fue debido a los desnudos de la pareja protagonista. Por aquel entonces el matrimonio Cruise, Nicole y Tom. Lógicamente, se habló más de ese detalle que del film en sí. Seguramente en vista de su complejo desarrollo. Éste hecho me recordó notablemente a otra interesante obra, Solaris, en la que George Clooney mostraba su trasero y eso, para alegrías de muchas, fue sin duda tema para hablar. Sin embargo el contenido del film quedó en el olvido, en la nada. Solo unos pocos de cinéfilos (que espero no sean pocos) supieron ver la magnificencia del film.
Pero hablamos de Eyes Wide Shut. A Kubrick no le hacía falta una polémica así para vender una película, pues no era un director cualquiera. Tras su filmografía nos había dejado joyas únicas y a cada cual diferente, cosa que no han conseguido muchos directores hoy día.
El film nos habla de un matrimonio adinerado. En una conversación íntima, la esposa le confiesa a su marido que hubo una vez en la que estuvo a punto de dejarlo todo para irse con alguien que ni siquiera conocía. La forma en la que lo dice y su locura, hacen temblar al marido. Éste acude a una llamada de un cliente y mientras tanto piensa e imagina los momentos citados por su esposa. Es en su viaje nocturno cuando empiezan a ocurrir cosas inimaginables. Desde una mujer que se le declara en un velatorio hasta la "visita" a un club privado hedonista que se las harán pasar "canutas". Todo sin embargo, ocurre bajo una razón, una perspectiva y una óptica que tenía muy clara el director.
Y es que el film no solo cuenta con su trama una simple moraleja. Mas bien encierra muchos detalles que abren puertas a diversas explicaciones. Y no son sub-tramas, son mas bien un compendio de situaciones que se irán esclareciendo probablemente con cada visual.
Desde luego, si Kubrick quería dejar algunos mensajes claros, los deja de manifiesto en el film. Los peligros fuera del matrimonio, la mentira y su condena y básicamente lo que es en sí esa casta unión. ¿Y en qué consiste? Se explica perfectamente en la ultima frase que pronuncia el personaje de Kidman al concluir el film. Esa es la visión del director y es en gran manera de una lógica aplastante. ¿Que porqué no la digo? Mejor la veis si aún no lo habéis hecho.
Esta vez, el director realizó una selección musical muy brillante. Todo lo contrario que ocurrió con La Chaqueta Metálica y el Score realizado ocultamente por su hija Vivian. En el soundtrack encontramos temas de Jocelyn Pook, una controvertida artista y a la vez misteriosa. Sus discos Flood y Untold Things son altamente recomendables. Pook mete mano a su música en las escenas del club privado hedonista. Y son francamente perfectas. Era la indicada. Una muestra de su valía es éste tenebroso tema que os pongo a continuación, que proviene de las escenas de los rituales. Sencillamente magnífico.
Junto a ello, mezclamos temas jazzísticos de Mehldau o Gerson. Pero sin duda. "El Tema", el señor tema. El "Temón", viene en esa pequeña escena en la que el matrimonio protagonista regresa a casa, se apaga la imagen y al encenderse vemos a Nicole frente al espejo, totalmente desnuda. Llega su marido y la besa acaloradamente. Es entonces cuando desde el primer fogonazo de encendido tenemos al gran Chris Isaak con su Baby did a Bad Bad Thing. Temazooooo.
Son tremendas las escenas compartidas entre la pareja protagonista, cada uno con sus quehaceres y de fondo el Vals desde la Suite Jazz, que es el tema con el que comienza el film. Pero sin duda, y lo que más nombre le da al film es su inicio y final del soundtrack con la Musica Ricertata II de Dominic Harlan aunque originalmente de György Ligeti. Una escena en la que suena y le va al pelo es el momento en el que al protagonista lo sigue alguien. Música y escena a primer nivel. Van que ni al pelo.
Un Soundtrack de lujo que va a juego con una película exquisita, para unos paladares refinados.
Se cuenta que a raíz de éste film, la relación de Nicole Kidman y Tom Cruise fue a pique.
Curiosamente, teníamos en el film a Sidney Pollack, que falleció no hace mucho desgraciadamente. El papel de él estaba pensado primeramente para Harvey Keitel, pero según las malas lenguas fue contratado en parte para "controlar" al bueno de Kubrick y no se desmadrara. Sin embargo, vemos que al final hizo lo que quiso. Parte de ello fue notable en la orgía del club, donde el director corría el riesgo de llegar a una clasificación X. A diferencia de en 2001, donde tuvo que recurrir a monos "tapados" en vez de hombres desnudos como él quería, aquí la censura no pudo con el y no quitó ninguna escena. Sin embargo, para evitar la clasificación, el film se estrenó en EEUU con escenas tapadas. Por lo que se ve, en los planos mas explícitos aparecían siluetas puestas delante evitando la vista completa.
Tenemos que alabar a la pareja protagonista, y me vuelco con Tom Cruise una vez más (ya sabéis que yo soy de los pocos que lo apoyan). Cruise no sabe elegir la mayoría de sus papeles, pero es un buen actor. En este film vuelve a relucir al cien por cien. Sigue estando infravalorado, pero entre sus aciertos nos ha dejado obras como Jerry Maguire, Nacido el Cuatro de Julio, Collateral y por supuesto, Eyes Wide Shut. Un actorazo
Por supuesto, yo no he hablado de todo el contenido que se saca en el film, porque es mucho, y con cada visión, los detalles se engrandecen. Ejemplos como el de los momentos que tiene el protagonista para romper su matrimonio sexualmente hablando con otras personas y lo que acaba haciendo finalmente es solo una de las decenas de detalles que podemos sacar. Es un film para verla con amigos cinéfilos, ya que sin duda, es una alegría y un buen punto el pasar momentos debatiendo escenas y mensajes de un film tan grande como lo es su director. Stanley Kubrick
Lo mejor del Film: Absolutamente Todo
Lo peor del Film: Absolutamente Nada.
Calificación: 10/10
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.