Una historia de amor en un mundo de magia. Así podríamos catalogar a
El Ilusionista.Nos cuenta la vida del mago Eisenheim y de cómo se enamora de la prometida del príncipe heredero.
En el papel del protagonista tenemos a
Edward Norton, que a mi parecer y a pesar de algún tropiezo, sigue siendo de los mejores y mas carismáticos actores del mundo. Y en ésta película logra transmitir lo que quiere. Esa ansiedad por huir, ese Eisenheim calculador. Si, hay una escena en la que para mí está la clave y la base de la película. Ese momento me hizo pensar después de haberla visto por segunda vez, en el planteamiento de Eisenheim, en su plan maestro.
La escena es justo después que el le propone a la chica huir y dejarlo todo. Le pregunta... ¿De verdad te irías conmigo? Y ella casi sin pensarlo dice... Si. Es justo entonces cuando la cara de Eisenheim lo dice absolutamente todo. Para mi, ese plano no tiene precio. Esos ojos moviendose de un lado para otro no querían mas que decir que su mente estaba trabajando. Increíble trabajo.
Norton lo borda, claramente.
"No te muevas que me estropeas el número!"Por otra parte no todo va a ser de rositas. Desde mi punto de vista, la película tiene puntos negativos que son en referencia al porqué debemos de creernos esos trucos. Es ahí cuando El Ilusionista se vio menguada y ensombrecida por otra película que salió a la par.
El Truco Final de
Christopher Nolan. Ni que decir que hablamos de obra maestra y que a diferencia de
El Ilusionista (entre otras muchas diferencias) ésta hablaba de trucos, y los mostraba.
El Ilusionista se sopesa sobre todo en su historia de amor, lo cual intenta contrarrestar el porqué a esos trucos. De ahí que no me crea siquiera que ni mostrándome un plano sobre el tiesto de las naranjas, me lo tenga que tragar. No, eso no es creíble, aunque sí es cierto que hay grandes ilusionistas como
Copperfield y otros no tan conocidos. Juegan con la mente, y creo que ése es un fallo en la película, pues esos juegos o trucos, no son creíbles.
Por otra parte tenemos la banda sonora de
Phillip Glass. A mi
Glass me ha gustado de siempre, pero tengo que reconocer que toda su obra desde años ha, se basa en dos acordes. Y eso no solo resulta repetitivo, sino cansino también. En cuanto a bandas sonoras, oír
Las Horas o
El Ilusionista es practicamente lo mismo. Y es que
Glass hace del uso de dos notas una armonía muy atractiva pero que resulta cansina.
"Mmm. Tenía que haberme dedicado a la ingenieria en vez de ésto." Edward Norton.
Lo Peor del Film: No hay explicación aparente para la mayoría de los trucos, y las que hay son un poco absurdas.
El Momento:
La fase preparación-trama final.Calificación:
7/10
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.
