"¿DONDE ESTÁ PAPÁ?"
¿De qué va?
Una familia disfruta de sus vacaciones en la nieve. En un almuerzo al aire libre, una avalancha aparentemente controlada ocasiona una situación de terror que dura tan solo unos segundos, tiempo que será suficiente para que la reacción del marido haga tambalear la estabilidad familiar.
Reparto
Johannes Kuhnke es Tomas
Lisa Loven Kongsli es Ebba
Kristofer Hivju es Mats
Fanni Metelius es Fanni
Dirección
Ruben Östlund (Play)
Impresiones
Ganadora del premio del jurado en el pasado festival de Cannes, Force Majeure, también llamada Turist, estuvo a punto de llegar a los Oscars aunque a última hora fue una sorpresa su no-entrada (también lo fue para el director y el productor, quienes se grabaron en las nominaciones y se llevaron todo un chasco en directo). Se conformaron con la nominación a los Globos de Oro que tampoco es moco de pavo. Cabe destacar que la crítica contiene spoilers ya que mi comprensión no podría estar completa si no menciono ciertos aspectos de la obra.
Fuerza Mayor es un drama sueco que nos ubica dentro un de un problema interno en un entorno familiar. Tras una avalancha que se acerca al restaurante donde están nuestros protagonistas, el pavor se dispara y todos huyen. Sin embargo Ebba se queda con sus niños protegiéndolos porque son pequeños. Pero, ¿donde está Tomas?. Ha huido, le ha dado tiempo a coger su teléfono y sus guantes y ha dejado a los suyos atrás. El pánico se apodera de él, aunque su sangre fría al coger su teléfono móvil da mucho que pensar. Éste hecho que acaban viendo como una anécdota hasta cierto punto graciosa, se torna en frialdad cuando en una cena, Tomas niega la visión de los hechos, tratando de quedar como un héroe. Ebba no lo ve así porque ella tiene razón, pero Tomas quiere "negociar" para que la versión no sea tan fea, pero cuando unos amigos los visitan, Ebba vuelve a contar con pelos y señales el hecho ocurrido, dejando al marido contra la espada y la pared, como un ser despreciable ante los suyos y sus amigos.
Llegados a éste punto, nos damos cuenta que la cinta ha sido vendida de forma engañosa y ha supuesto un chasco para muchos, que esperaban una película de suspense, con avalanchas. El trailer la ha vendido así y el póster recrea precisamente la escena clave de la obra. Lejos de ésto, la cinta va más allá al mostrarnos un drama sobre sentimientos encontrados presentando ese momento como el punto de inflexión que hará al personaje quedar como un cobarde. Y es que no hay ser más despreciable en el mundo que aquel que es capaz de abandonar a sus hijos y su mujer y sin embargo recoger su teléfono móvil como si fuera lo más importante en el mundo.
Conforme avanza la película, las situaciones y el malestar se incrementan. Pero lejos de ahondar en el patetismo que rodea a Tomas, el director quiere dar a entender que a veces esas reacciones -perfectamente explicadas por su amigo Mats en la cena- son impulsos primitivos que anulan algunas de nuestras facultades, haciendo que el terror que se apodere de nosotros nos haga actuar así. Y ésto lo vemos en el tramo final, cuando es su esposa quien sale la primera del autobús ante el pánico de un conductor temerario, dejando atrás a todos los pasajeros, incluyendo su marido y su hijo. Pero ésta reacción es muy ensuciada a mi parecer por la escena que ocurre justo antes. Cuando el marido rompe a llorar en lo que a mi me parece una actuación sobreactuada y patética, hecha aposta, es todo un paripé para que sus hijos, que temen desde el principio por el divorcio acaben viéndolo como un héroe ante una estrategia maquinada por él y su pareja cuando acude en su ayuda en la nieve al creerla perdida. Por lo tanto, el resumen queda claro, el patetismo del hombre acaba por demostrar que su reacción no es única, ella acaba retratada al actuar como él ante un momento de pánico que le incomoda.
En resumidas, es una cinta que parece que no dice nada pero tiene mucho mensaje. El problema está en su realización, es una cinta lenta que para colmo su duración de dos horas no ayuda. Si le añadimos su campaña engañosa el resto se queda como un producto correcto, que se ha visto abultado por sus nominaciones en premios tan grandes como Cannes o los Globos de Oro, pero que no pasa de ahí. ★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.