Episodio de transición que, fiel a la idiosincrasia de la serie, si bien no avanza en los planteamientos que nos dejó el brutal cliffhanger del capítulo anterior (con Jay Garrick revelándose tras las máscara de Zoom) sí que aprovecha para ir atando cabos sueltos que se han ido dejando en el último tramo de la temporada. Por ejemplo, ¿por qué Zoom está tan obsesionado con obtener mayor velocidad? ¿Por qué Barry no logra alcanzar la velocidad de su enemigo por mucho que se deje la piel entrenando (y lo hace)? ¿Cuáles son los efectos perniciosos del compuesto Velocidad-9? Todas estas cuestiones se van planteando y resolviendo al mismo tiempo que una nueva y misteriosa velocista aparece en la ciudad... y no precisamente para ayudar a nuestros héroes.
El episodio discurre a través de dos conceptos básicos. Por una parte, la frustración de Barry al no ser capaz de igualar la velocidad de Zoom por mucho que lo intenta. Saberse en inferioridad de condiciones y no ser capaz de aumentar sus niveles de poder lo tiene al borde de un ataque de nervios. Aún sigue pensando que hay todo un mundo (con los correspondientes dobles de sus seres queridos) que ha dejado expuesto a la ira del villano, y esto es algo difícil de tragar para alguien de su rectitud moral. Un vibrante prólogo nos da una idea de lo lejos que es capaz de llegar Barry para conseguir mejorar... y del siempre divertido genio científico de Cisco. Esto lo llevará al punto que se explora en otra de las tramas centrales del episodio: la crisis deontológica del héroe corriendo a toda velocidad por una cuerda floja en la que la tentación de aumentar su poder por medios tan artificiales como dañinos (Velocidad-9) se muestra peligrosamente al alcance de la mano. Esta tentación tomará el cuerpo y la forma de una nueva villana que hará tambalear también la credibilidad de las acciones de Flash para sus conciudadanos. La recién llegada Trayectoria constituye un reflejo distorsionado de sí mismo tan capaz de pasarle por encima como de liarla parda allá donde va.
Finalmente todo se descubrirá obra de una antigua compañera de Caitlin en Mercury Labs, Eliza Harmon. De ayudar a fabricar una parte del compuesto la científica ha pasado a replicar la fórmula para dejar de ser la eterna segundona. Sólo que la joven desconoce los efectos de
Velocidad-9.
En primer lugar resulta tremendamente adictiva, convirtiendo a Eliza en una yonki de la velocidad. En segundo lugar, poco a poco va mermando la cordura (y algo más) de la chica, convirtiéndola en una espídica agente del caos que lo mismo roba carteras y bancos que se dedica a destruir la ciudad.
Los efectos secundarios del compuesto que ya causó la enfermedad de Jay sublimados por el abuso de su consumo. Toda una señal de "No tocar" para Barry. El enfrentamiento final entre ambos velocistas servirá a tres propósitos: obligar a Barry a dar un
salto de fe y confianza en sus posibilidades, constatar el inmenso poder adictivo y destructivo de
Velocidad-9 y dar una pista sobre las motivaciones del villano. En una última carrera mortal, Trayectoria acaba descomponiéndose a nivel atómico debido a los efectos del compuesto, pero en esos últimos momentos la traza de velocidad que deja tras ella se convierte en color azul... igual que la de Zoom.
Aquí puede estar el quiz de la cuestión: el villano también puede estar muriendo debido a los efectos del Velocidad-6, al igual que Jay, y por eso es más rápido y necesita absorber la velocidad de otros velocistas para permanecer con vida.
Esta teoría se ve confirmada por las visiones de Cisco cada vez que entra en contacto con el casco alado de Jay: su fallecido compañero se encuentra bajo la máscara de Zoom. En este punto, el espectador y el equipo de héroes se encuentran al mismo nivel de conocimiento. Algunas incógnitas de han despejado, pero quedan muchas más por aclarar. La primera de ellas,
¿puede Zoom ser tan rápido como para estar simultáneamente en dos dimensiones diferentes? Puede ser, aunque me decanto más por la teoría de la existencia de varios
Jays de diferentes dimensiones/mundos. De ser así, el concepto de
Multiverso explotaría definitivamente ante nuestros ojos de forma electrizante. ¿Y quién es el misterioso
hombre de la máscara de hierro? ¿Tal vez otro Jay al que han robado la velocidad? ¿O incluso otro Barry?
Estas cuestiones son las que hacen que Flash esté muy por encima del resto de series de la cadena en la actualidad. Por lo demás, Wells sigue brillando, en este caso cuando sus métodos protectores son puestos en jaque por su hija. quien por cierto resulta expuesta a los efectos del
Velocity-9 durante el capítulo. ¿Tal vez el germen que acabará convirtiendo a Jesse Wells en
Jesse Quick? Veremos. De momento, parte rumbo a Opal City a vivir su vida. Está claro que el
exilio es el destino de los personajes que se van a guardar en la nevera un tiempo. En definitiva, todo esté preparado para abrir el arco argumental que servirá de cierre de temporada. Y las cosas no pueden pintar mejor.
Por Antonio Santos