"-MAMÁ ¿PODEMOS IRNOS A DORMIR?
-SÍ. PRONTO NOS BUSCARÁN UN LUGAR
-NO. EN LA CAMA, EN LA HABITACIÓN"
¿De qué va?
Jack acaba de cumplir cinco años. Ha nacido en una habitación de la que no puede salir. Cree que el mundo se basa en la pequeña televisión que ve. Su madre, que lleva siete años secuestrada, hace lo posible por hacerle llevadera la vida a su pequeño en apenas un cuadrado de vida. Sin embargo, mientras Jack crece más fuertes son las dudas sobre el exterior
Reparto
Brie Larson es la Madre
Jacob Tremblay es Jack
Sean Bridgers es Nick
Joan Allen es Nancy
William H. Macy es Robert
Dirección
Lenny Abrahamson (Frank)
Impresiones
Tras la maravillosa Frank (para servidor, una de las mejores cintas del pasado año), Lenny Abrahamson realiza una cinta muy interesante por darle una vuelta de tuerca más que eficaz a lo que podría ser un guion tópico. La trama se centra en un rapto donde una mujer lleva encerrada en una habitación durante siete años junto a su pequeño hijo, quien nació allí y no conoce el mundo exterior. La cinta nos sitúa desde el primer momento en aquel lugar, de hecho, la primera parte es íntegramente realizada en aquel cubículo casi claustrofóbico. Si ni siquiera hemos leído la sinopsis, la sorpresa será mayor ya que comenzaremos a hacernos preguntas sobre por qué están allí. Los primeros pasos nos sitúan a Jack saludando a sus muebles, su armario donde duerme, su lavabo, el sanitario, la bañera y sobre todo, la televisión. Aunque se ve mal, para él es una forma mágica de divertirse, ya que lo que ve le parece artificial. Ha nacido en un cuadrado y cree que no hay más que eso. Sin embargo, llegará un punto en que su madre planee algo descabellado y será aquí cuando la cinta se divida en dos líneas de las que hablaremos a continuación.
Antes de nada, cabe destacar que la cada vez mejor
Brie Larson está más que bien, pero
en ésta ocasión, el pequeño Jacob Tremblay (el cual me tiré media película pensando que era una niña) le roba todo el protagonismo siendo uno de los mejores papeles vistos en mucho tiempo en la piel de un niño. No, no es cargante, no es pesado, como el pelmazo de Tan fuerte, Tan cerca, ni tampoco es tan soporífero como el de Boyhood, es un niño que se ha empleado a fondo, haciendo creer al espectador la dura realidad que vive en su piel. Tanto es así, que es de las pocas veces que pienso que un Oscar para un menor primerizo está más que justificado, porque su papel impresiona con creces.
Esto es así por las dos vertientes que se abren en la cinta. La primera es sobre su mentalidad en un mundo de ficción donde todo lo del exterior es para él un universo creado en la televisión. La segunda mitad resurge en una explosión que impacta en su cabeza justo en el primer momento en el que sale al exterior y ve la luz, recibiendo una masiva información de todo, incluyendo a las personas. A continuación y como consecuencia, la cinta se abre al sentir de ese nuevo mundo, su periodo de adaptación y la nostalgia hacia el sitio donde nació y vivió, haciéndole muy difícil la convivencia aun estando por suerte en un periodo de vida "moldeable".
Y es por esto que la cinta de Abrahamson sale con la cabeza bien alta al no limitarse a narrarnos una vivencia sobre un rapto y su escape, sino también la parte humana que se centra en el pequeño Jack y las consecuencias que no solo afectan al pequeño, si no también a su progenitora, quien se tortura preguntándose si es buena madre fuera de ese pequeño universo creado durante siete años y del que por suerte pudo salir. Un infierno para ella que convertía en un lugar mágico y ficticio con tal de hacer la vida más llevadera al pequeño Jack.
Sin lugar a dudas estamos ante una cinta más que interesante por su renovada idea y por el conjunto de actores, incluyendo el breve papel de William H. Macy y con mayor fuerza el de su esposa en la ficción, Joan Allen. Junto a esto destacamos la banda sonora de Stephen Rennicks, quien ya realizó el score de la divertida Frank, también de Abrahamson. En resumidas, una cinta inolvidable, sobre todo por el voraz papel del pequeño Trembley que sin duda alguna tiene en sus manos la mejor actuación del 2015. ★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.