"MI VIDA NO TIENE NADA ESPECIAL, PERO ME LO PASO BASTANTE BIEN"
¿De qué va?
O-Ei es una de las hijas Tetsuzo Hokusai, un artista del dibujo que se convertiría en esencial de cara al futuro dentro de los pesos pesados del arte. Sin embargo, su hija, también dibuja pero sin gozar del reconocimiento de su padre.
Dirección
Keiichi Hara (Colorful)
Impresiones
Basado en el manga Sarusuberi de Hinako Sugiura donde se nos contaba la trayectoria de O-Ei, la hija de Tetsuzo Hokusai. Mediante historias cortas, se repasaba el camino de ésta joven que aun resultando ser bastante liberal, no encontraba el beneplácito de su padre que le otorgara el reconocimiento en vista de su facilidad a la hora de dibujar, llegando incluso a hacer trabajos que su padre acabaría firmando.
Tetsuzo Hokusai se convirtió en leyenda ya que muchos pintores de renombre lo han tenido como referencia, sobre todo por su conocida obra La gran ola de Kanagawa. Por aquel entonces era muy normal cambiarse de nombre cuando se ascendía en prestigio. Es por ello que Tetsuzo no era su nombre real. Se llamaba Tokitaro y finalmente se quedó con el de Katsushika Hokusai, nombre por el que es más conocido y que acabó siendo referente de Van Gogh o Monet entre otros. Sin embargo, Miss Hokusai no analiza su vida ni su obra, más bien se centra en una de sus hijas, O-Ei, y al igual que el manga, lo veremos mediante historias cortas que acompañan a las estaciones del año.
Ese es el primer pequeño fallo de la cinta, el no gozar de una continuidad, porque lo que se consigue al final es que unas historias sean mejores que otras. Por supuesto, el misticismo japonés está presente, e historias como la de la geisha y su cuello alargado llaman la atención, pero aportan poco a todo aquello que tiene que ver con la historia del pintor y su hija. Si obviamos la importancia de su arte, nos encontramos a una protagonista indecisa que parece no encontrar su sitio, que va de aquí para allá, que por momentos nos muestran su relación con la hermana ciega, por otros trata de unir a su padre con el resto de la familia, como de pronto decide irse con un "geisho" para probar las artes amatorias y así profundizar en sus dibujos. El resto de personajes secundarios no se queda atrás ya que no aportan absolutamente nada y de buenas a primeras, en un soplón en los créditos finales nos narran el trayecto final de la familia Hokusai dejándonos totalmente indiferentes.
He de reconocer que me he aburrido y eso que soy un enamorado del anime, pero en ésta ocasión no me ha aportado nada éste producto de la mano de Production I.G y que para colmo, rompe por completo con una banda sonora que rechina. Nos encontramos en Edo, año 1814, lo que se convertiría en Tokio. Es decir, gente caminando entre samurais, monjes y todo tipo de personas. La música, que a veces es muy hermosa y compacta con una orquesta de ensueño, se difumina cuando entra en acción un vociferante "rockeo" que no solo rompe la armonía sino que chirría, desencajando el estilo y el tiempo. En resumidas, un fallo dentro de ese magnífico mundo de la animación japonesa. La anterior cinta de Hara, Colorful, está a años luz.
Off-Topic
A modo de detalle y como curiosidad, podemos encontrarnos en más de una ocasión a lo largo de la película algo similar a un símbolo nazi pero invertido. Ésto no era más que una ovación positiva, dirigida al sol y que se usaba mayormente para indicar en un mapa donde se situaban los templos, de ahí que fuese fácil encontrarlo en algún monumento o casa. Los nazis hicieron suyo el símbolo y se lo aplicaron a su manera y forma. Hartos de la comparativa, Japón lleva tiempo queriendo eliminar la esvástica ya que causa impresión a las visitas extranjeras. ★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.