"ME GUSTARÁ TENER UNA VIDA NORMAL TODOS LOS DÍAS"
¿De qué va?
Anna es una chica que no se relaciona con sus compañeros de instituto. Tiene una fría relación con su madre adoptiva y sufre de asma, por lo que cambia de aires junto a la familia Oiwa. En aquel hermoso pareja observa una inmensa casa que le trae recuerdos aunque no sabe bien el por qué. Será cuando conozca a Marnie, una chica con la que entablará una inmensa amistad...
Dirección
Hiromasa Yonebayashi (Arrietty y el mundo de los diminutos)
Impresiones
Basada en la novela o cuento de Joan G. Robinson y trasladado a la pantalla en formato animado por los estudios Ghibli. Tras la salida de Miyazaki, el estudio colapsó hasta tal punto que When Marnie Was There (Omoide no Mânî) va a suponer la última película de Ghibli por un tiempo indefinido. Se anunció un "descanso" en forma de reestructura -no un cierre- ya que tras la salida de su peso pesado, han gastado demasiado dinero en contrataciones fijas, por lo que van a esperar a la terminación de contratos para volver a las contrataciones "freelances", como hacían en antaño. Esperemos que el tiempo sea corto y puedan seguir deleitándonos con joyas visuales para el público adulto como es el caso de When Marnie Was There.
La cinta de Hirosama Yonebayashi ha logrado la nominación al Oscar, y sin embargo sufrió un relativo fracaso en su estreno en Japón. Todo esto se debió según el presidente actual por una mala campaña de marketing más enfocada al público juvenil cuando el cine de Ghibli está más enfocado para los adultos aunque puedan gozar los pequeños de su arte también. En el caso de ésta película obtenemos una composición que nuevamente nos presenta a un protagonista juvenil, una chica, pero con unos problemas en su vida que la hacen resentir del mundo que la rodea, ofreciéndonos gota a gota algunas pistas de por qué se comporta así, huyendo de todo y de todos, sin ánimo de fiestas ni compartir un solo comentario con nadie.
Nuevamente tenemos presente una
enfermedad, como en el caso de
Arrietty, donde el niño acudía a un paraje más sano, alejado de la ciudad para estar tranquilo y descansar. De la misma forma, Anna asiste a un bello lugar -nuevamente
la paleta de colores y los contrastes de acuarela están presentes, marca de la casa- para aliviar su dolencia. En el desarrollo aparecerá Marnie y tal y como nos desprendían los avances dudaremos sobre su presencia. No es la primera vez que la ilusión se apodera de una protagonista. Sin ir más lejos, en
El viaje de Chihiro -mi favorita del estudio- ésta era su mayor baza a la hora de evolucionar la historia. Pero no cabe duda que hay perlas que nos recuerdan a clásicos como
El invisible Harvey, protagonizada por
James Stewart, o de forma más reciente, la divertida y oscura
The Voices de
Marjane Satrapi. Cintas que tienen en común la imaginación en forma de locura, apoyo o como en el caso de
When Marnie Was There, de poder expresarse con soltura.
No es la mejor obra de los estudios pero sí una muy interesante -¿acaso tienen alguna mala?-. Le cuesta un poco arrancar, hay minutos en su primera mitad que se alargan en demasía, mostrándonos constantemente lo reacia que es Anna ante los demás. Son sus treinta e impecables minutos finales los que se disparan magistralmente dejándonos una historia triste, trágica pero hermosa a su vez -sobre todo para los no conocedores de la obra de Robinson- y que logran que veamos la película de otra forma a lo que estábamos "catando" en su primera mitad, la cual divaga poco a poco entre Anna y la nueva relación con Marnie.
Sin lugar a dudas y como era de esperar, estamos ante una película hermosa. Ghibli vuelve a los grandes premios como pasó con el anterior trabajo de la productora,
El cuento de la princesa Kaguya, aunque para mi gusto, la cinta de
Takahata está varios escalones por encima de ésta. En resumidas, un producto que encantará a los seguidores de la casa de Totoro, una cinta para toda la familia, con mayor peso en los adultos, sobre todo en su acertado tramo final.
★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.