"BIZZZZZZZZZ"
¿De qué va?
Una mariquita recién nacida que acaba de perder un ala se ve envuelta en una extraña aventura, apoyando a unas hormigas que se llevan a su hogar una caja de azucar....
Dirección
Thomas Szabo & Hélène Giraud (Minúsculos, la vida privada de los insectos)
Impresiones
Basada en la serie del mismo nombre, ésta producción francesa nos invita a un hermoso recorrido por la naturaleza a través de los ojos de unos pequeños insectos, especialmente una mariquita que tras perder el rastro a su familia por curiosa, se ve en una carrera para evitar que un grupo de hormigas pierda una caja de azúcar que unos humanos se dejaron en un picnic. De ésta forma, la aventura está servida durante casi hora y media.
He escuchado y leído críticas sobre ésta película que la encumbran a prácticamente una obra maestra. En la mayoría de ellas hay un punto en el que concuerdan y es en el hecho de ser totalmente muda. Parece que por eso ya una película tiene que ser brillante, y no cabe ninguna duda que siempre será más complicado rodar una película muda que una que tenga diálogos, pero no hace falta recurrir al pasado, al comienzo del cine, para hacer una pequeña comparativa. Pixar ya lo hizo de una forma magnífica, con muchísimo más garbo y dejaba impregnado un homenaje al cine mudo en Wall-E. Esto no quita que Minúscule: La vallée des fourmis perdues sea mejor o peor, de hecho, la serie original en la que se basa lo atestigua con cerca de ochenta episodios.
El problema reside en ofrecernos un producto en el que su argumento es tan pobre e infantil, que la única pretensión para acercarse a la pantalla a verlo pueda ser su tecnología. Porque la mayor falla de ésta historia es que se hace muy larga y con diez minutos hemos visto suficiente, de ahí que funcione mejor a modo de serie. El único pretexto para disfrutar de su belleza, que sin duda alguna la tiene, es el 3D. La tecnología usada en ésta cinta nos permite pasearnos como si fuesemos un insecto más en esas carreteras invisibles donde el tráfico está mas vivo que nunca. Moscas que suenan como motos y carreras al más puro estilo Podracer, serán los ingredientes que encajarán con el paisaje, auténtico protagonista de la obra. Su visual nos permite ver el interior del bosque como si andáramos por sus sendas. Ese es el único modo de aguantar su metraje hasta el final, su hermosa visual, y esa es la mayor pena de la película porque de tener un guion medianamente interesante y más adulto -me refiero a un tono más familiar que infantil- de seguro habría ganado muchos enteros, porque en lo que respecta a su artesanía, eso ya lo tenían completamente mascado.
No cabe duda que la mariquita y la hormiga protagonistas son entrañables, pero no son suficientes y tan solo ellos dos, su visual, y la hermosa banda sonora de Hervé Lavandier convierten a ésta película en simplemente correcta, no dejando de ser una curiosidad para todo aquel que quiera explorar dentro de esa mezcla de animación y mundo real. ★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.