"ME DEJÓ UN TRABAJO POR HACER Y MI VIDA NO VALDRÁ LA PENA HASTA QUE NO LO ACABE"
Johnny Worricker comienza a vivir nuevos cambios en su departamento en el MI5. Un documento secreto puede llegar a hacer tambalear al primer ministro británico por lo que Worricker comenzará a ser atacado por su propia gente mientras que su vecina parece querer obtener algo de él.
Bill Nighy es Johnny Worricker
Rachel Weisz es Nancy Pierpan
Michael Gambon es Benedict Baron
Felicity Jones es Julianne Worricker
Ralph Fiennes es Alec Beasley
Judy Davis es Jill Tankard
David Hare (Un pasado en sombras)
Muy complicada de ver en nuestro país por ser una cinta
exclusiva para televisión de la cadena BBC.
David Hare es el creador de la historia, encargado de escribir y dirigir
Page Eight, una cinta atípica de espionaje, tapaderas y política. La
BBC es especialista en producir series de este tipo, que por desgracia apenas emiten en nuestro país pero que gracias a la red y la compra directa podemos disfrutar de títulos y sagas similares como la de
Wallander, también muy recomendable y protagonizada por el magnífico
Kenneth Branagh. Sin embargo,
Page Eight, la historia de Johnny Worricker, que parece también sacada de una saga de novelas,
fue concebida como única, pero tuvo tal éxito que tres años después se continuó la historia convirtiéndola en trilogía.
La cinta goza de caras conocidas de primera línea a la altura de Ralph Fiennes, Michael Gambon y sobre todo, el protagonista absoluto, un Bill Nighy que da gusto de ver, ejerciendo de antiguo veterano como "analista de inteligencia", está magnífico y da la talla en todo momento, haciendo que la historia cobre un nivel aun mayor. Es una historia sobre espionaje a un grado superior, donde la madurez de los protagonista ofrece ocasiones creíbles, donde lejos de los artilugios y las carreras, aquí encontramos diálogos magistrales, huidas calculadas y milimetradas y sobre todo mucha inteligencia.
Johnny Worricker es un veterano viejo seductor que ha probado las mieles del amor en la carne de varias mujeres, amante empedernido del jazz, coleccionista de arte y muy amigo de su superior, Benedict, director general del MI5, con el que compartió escuela y también mujer. Nighy y Gambon forman un dúo genial en pantalla, mostrando una amistad de hierro hasta en los malos momentos y su conexión en forma de diálogos es realmente fascinante. La historia de Page Eight puede parecer algo enrevesada al poseer dos vertientes, pero es más sencilla de lo que parece. Al leer un documento secreto, Worricker descubre entre líneas que hay un mando británico que sabe del lugar de prisiones clandestinas americanas, incluyendo el nombre de ciertos terroristas. Suponiendo que nadie sabía de esto, Worricker tiene en su poder el documento que podría hacer tambalear al primer ministro y entre ellos surge una tensa pero espectacular conversación, denotando la corrupción del poder, haciendo estar a su propio departamento en contra, espiando al espía.
La entrada de Rachel Weisz como vecina da cierto aire tranquilo en el film, desahogándose por momentos de ese mundillo donde habita Worricker, pero ni más lejos de esto, nada será coincidencia y Nancy, sospechando que su vecino trabaja para el gobierno, pedirá ayuda para desvelar la forma en que murió su hermano en plena guerra, algo que ha sido ocultado para no manchar la reputación del gobierno. Ambos formarán equipo, ayudándose el uno al otro de forma indirecta y creando una unión que por momentos parece brotar en cariño.
En resumidas, es una cinta que corta la respiración. Elegante por su calidad británica y con unas interpretaciones que quitan el hipo. La trayectoria de Worricker no podía quedar aquí, por lo que las dos películas que vendrían después serían recibidas con los brazos abiertos, así que desde aquí os ofreceremos la reseña de la trilogía al completo. Es muy recomendable, madura y una pieza fundamental para los amantes del séptimo arte y el genero del espionaje, revuelto con tramas políticas y conspiraciones donde nadie se fía de nadie. ¡Ah! y por supuesto, Bill Nighy como protagonista absoluto. Lo dicho, ¡espectacular! ★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.