Durante los años 80 la fantasía épica de héroes y espadas se había conseguido instalar en la imaginación de la mayoría de los adolescentes con una avalancha de cultura que bebía del cine, las historietas e incluso la música. No es casualidad que películas como
Conan o
Krull, las portadas de los discos de
Manowar, los pinceles de
Richard Corben y la hegemonía mediática de He-Man ilustraran tendencias que hoy parecen en declive viendo los resultados en taquilla de
John Carter. La fantasía heroica de los universos de
Tolkien o
George Martin, sin embargo con una enorme repercusión reciente, no posee los tonos salvajes y desenfadados de hace treinta años. Estamos hablando de bárbaros y brujería, de dragones y en muchos casos héroes en taparrabos tripulando naves futurístas.
Los videojuegos y los juegos de rol tradicional pusieron su granito de arena a la hora de amasar esta tendencia y una de las recreativas que mejor supo focalizar toda esa subcultura es el clásico
Golden Axe de Sega.
Golden Axe tuvo una excelente acogida, pese a lanzarse prácticamente en el ocaso de las historias de bárbaros aventureros. Como alternativa al juegos que conforman leyendas hoy en día como
Final Fight o incluso al de las, por aquél entonces, recién llegadas e imparables
Tortugas Ninja, La cruzada original contra el portador del hacha dorada tuvo muchísimo más impacto que sus inevitables secuelas. A
provechaba la placa System 16B de la propia Sega bajo la cual corrían otras glorias como Shinobi o Altered Beast, lo cual facilitaba mucho la adquisición de la rom para las maquinas de barrio. Mención especial es su versión de
Megadrive, la cual era CASI un calco con sus respectivas diferencias derivadas del desnivel de hardware que lo procesaba.
El argumento se centra en los tres héroes seleccionables, cada uno con el propósito de derrotar a Death Adder, el portador del hacha de oro. Para ello tendrán que recorrer pueblos, ruinas, bosques y ciudadelas, derrotando a toda clase de seres y entidades a pié o a lomos de diversas criaturas hasta llegar al Castillo donde se desarrollaría la batalla por el destino del reino de Yuria.
Golden Axe es un Hack´n Slash en toda regla, como
Devil May Cry, Bayonetta o
No More Heroes; con sus power ups, magias devastadoras y mecánicas de combos, aunque por aquel entonces los impactos no se contabilizaban y las pantallas estaban dibujadas en sprites de 2D. Eso significaba que el héroe elegido blandiría su arma contra todo aquello que tuviera enfrente, ¡incluido su propio aliado en batalla! La mecánica era de scroll fighting, lo que viene a ser adaptarse al avance de la pantalla hasta acabar con todo lo que se menea. El modo cooperativo añadía mayor diversión al precio de dividir ítems y monturas, pero sin embargo el contraste de personajes justificaba de sobremanera emprender la aventura en compañía.
Los héroes seleccionables no despuntaban demasiado de la tónica general de los Beat´em Up análogos:
Teníamos a Tyris la amazona , la más acrobática y veloz; el enano Gilius, de contundentes hachazos y mayor resistencia; y finalmente Ax el bárbaro, con su espada de dos manos y que venía a presentar un equilibrio de características con respecto a sus compañeros. Como siempre uno rápido, uno potente y uno, en medida, equilibrado.
Partiendo de que los personajes tenían distintas armas y habilidades, el juego además les dotaba de distintas llaves y técnicas únicas que daban cierta profundidad al combate. Además y como otro elemento esencial estaba el componente de magia, donde
cada personaje podía ejecutar devastadores hechizos elementales (basados en los elementos tierra, fuego y rayo) que dependiendo del número de botellas fuera recolectando y de la capacidad mágica del propio personaje, vaciaban el escenario de amenazas. La mayoría de botellas se recolectaban y perdían durante asaltos nocturnos entre escenarios por parte de unos pequeños duendecillos que servían las veces de fase de bonus.
Mención especial es la inclusión de varias bestias que ejercen de monturas para héroes y enemigos, enormes lagartos que derriban enemigos a coletazos o dragones de fuego entre otros. De hecho, la última entrega de la saga de
Golden Axe, la cual no es nada destacable, lleva el subtitulo de
Beast Rider advirtiendo precisamente que es uno de los elementos clave de la propia franquicia.
La ambientación de este universo está claramente definida por la de la película de
Conan el Bárbaro y de hecho esa era la absoluta intencionalidad del programador jefe,
Makoto Uchida. Como detalle adicional añadir que
los gritos digitalizados que se escuchan como sfx del propio juego proceden de esta película, así como de los filmes Commando o Rambo.
El Monstruo Final.
Death Adder es un malvado de libro de la fantasía épica: Ha secuestrado al rey y a su hija (pudiendo haber matado al primero, ya que no le servía de nada…), es el más alto y forzudo de entre sus secuaces, de hecho entre los que tiene gigantes, y además de gastar todo su presupuesto de vestuario en una capa de rigor y un enorme casco con cuernos y hombreras afiladas a juego, se encarga de repartir estopa con el mismo arma que da nombre al propio juego. Se dedica a gobernar con puño de hierro y a dar paseos por su castillo cuando no está asesinando a los familiares y conocidos de los protagonistas del juego. Seguramente por eso nunca le regalan ropa por su cumpleaños.
Este juego contó con varias versiones, resaltando la magistral conversión de
Megadrive con dos niveles adicionales y que añadía los modos Beguinner (para principiantes) y The Duel, donde realizabas batallas de one-vs-one contra otro de los héroes principales y servía para practicar técnicas y … bueno en realidad en este tipo de juegos soltar leches no necesita demasiada justificación. De hecho siete años más tarde para la SegaSaturn desarrolló una versión evolucionada de este modo, ya como un juego integro en sí, que seguía el gameplay directamente de los Fighting Games de espadas como
Samurai Shodown. La versión de
Golden Axe de
Master System representaba con dignidad la conversión recreativa al precio solo poder elegir a Ax el Bárbaro y sin multijugador, pero pudiendo elegir entre los distintos tipos de hechizos de los otros héroes ausentes.
Lo Bueno: Aunque no era especialmente largo, si es cierto que su sistema de juego y dificultad equilibrada lo hacen a día de hoy muy entretenido de jugar a pesar de los mal envejecidos pixeles originales. Las batallas por montar y domar las bestias in game son una enorme adición al repertorio de los héroes.
Lo Feo: Al igual que muchos juegos de la época, el ataque cruzado derivaba en que tanto el jugador como el compañero de batalla siempre acababan dándose alguna leche, presumiblemente involuntaria con cierta frecuencia. Esto es debido al conglomerado de golpes acrobáticos, ataques descontrolados, llamaradas de las monturas o simplemente intentos de rescate que acaban por rematar lo que empezó el enemigo. Cuando empiezas una partida siempre es motivo de risa, pero cuando escasean las monedas o continuaciones llega a ser una autentica putada.
Lo Malo: La maravillosa conversión de
Megadrive acarreó un enorme punto flaco: el audio original de recreativa era demasiado para los entonces programadores del port, que ya habían cumplido de largo con su adaptación. El apartado auditivo así como su banda sonora no solo no da la talla con respecto al original, lo cual guarda cierta lógica, sino que además tampoco es agradecido.
Conclusión.
El Género de los Beat´em Up encontró en
Golden Axe una manera distinta de entender sus propias reglas.
Double Dragon o
X-men Arcade supieron asentar muy bien su estilo mientras que la recreativa de Sega aportó toques de gameplay más allá de su ambientación que le dan una estabilidad y reconocimientos identificables todavía a día de hoy. Dicho esto, Sega también abordó los clásicos “yo contra el barrio” con varios aportes de esta saga en su IP
Streets of Rage, que venía a ser en el fondo su propia visión del
Final Fight de
Capcom. A pesar de la evolución actual que ha dado este género y con la llegada de
Devil May Cry en 2001 y los polígonos tridimensionales,
Golden Axe ofrece un entretenimiento clásico y más rustico, donde además de amortizar la moneda en la maquina, cobraba importancia rubricar tus iniciales en la tabla de Hi-Scores. Eso, y derribar enemigos de sus bichos para montarte tú después, hacia que mereciera la pena este juego.
Por El Monstruo de la Última Pantalla
Plataformas y Años: 1989 Arcade, MegaDrive 1990, Master System, DOS, Amiga, Atari ST, Amstrad, C64, Handheld, Spectrum, 2006 Wii (OnLive) 2009 Mobile, iOS, XBLA, PSN, Cloud
Editor, Sega
Estudio: Sega
Género: hack ´n Slash de scroll Lateral en 2D
Duración: alrededor de una hora si los dos jugadores no se han matado antes entre ellos.