En la presente reseña, tenemos el gusto de hablar de un cómic creado por artistas de la tierra. En este caso, los andaluces
El Torres y
Gabriel Hernández, un dúo que esperemos que dure, ya que nos están presentando obras muy interesantes como El Velo. Un cómic que disfrutarán todos aquellos amantes del género de terror y por supuesto, todos los que nos apasionan las buenas historias del noveno arte.
Sinopsis: Este cómic se cataloga como una novela gráfica, editada en 2010 por el sello español
Dibbuks. Cuenta con
El Torres en el guión y
Gabriel Hernández al dibujo y color. La novela nos presenta a Chris Luna, una “detective”, con un don bastante extraordinario ya que puede ver y hablar con los muertos. Ese don es usado por la policía, que recurre a ella en los casos en los que haya un cadáver de por medio. Un trabajo que por otra parte, está muy mal remunerado. Los únicos ingresos que recibe Chris, son por parte de “chivatazos” de los muertos, que les hablan y les dicen donde encontrar una tarjeta de crédito con fondos o una cartera con algo de dinero. Cierto día llega a casa una carta, en donde se cuenta que ha fallecido su tía en el pueblo natal de Chris y que le deja una casa en herencia, que el ayuntamiento desea comprar. Movida por el tema económico, vuelve a su pueblo. Pero algo va mal. Algo no cuadra en Crooksville. Chris Luna se tendrá que enfrentar a sus miedos de juventud y a una sensación oscura latente, que esta a punto de hacerse realidad.
Reseña: Miedo, terror, susto…Creemos que con cualquiera de estas tres palabras, quedaría resumido
El Velo. Porque cuando llevábamos leída la mitad, ya nos había envuelto con una atmósfera oscura, casi sucia, que hace que nos pensemos el pasar la siguiente página. Ante nosotros tenemos un ejemplo de cómo un personaje puede rápidamente dotarse de peso, de personalidad y que el lector, lo siga con ansia.
El Torres nos plantea un guión de una historia, con un trasfondo parecido a las que hemos podido ver en cine o en series, como
El Sexto Sentido o
Entre Fantasmas (incluso hace guiños a ellas). Aunque en este caso, el autor nos presenta una historia más cruda, que hace que se desmarque del género de suspense, para convertirse en un cómic de terror con todas las palabras. La psicología de Chris está muy bien conseguida, haciendo que a veces dudemos si realmente está loca o sus visiones son reales. El trauma de su juventud lo arrastra toda la historia y eso lo hace parecer insegura hasta el final. En cuanto a los personajes secundarios, están bien elegidos y encajan perfectamente con la acción. Todos aportan “su granito de arena”, para que la atmósfera, que se respira en el pueblo, sea agobiante.
El Torres, juega muy bien con los ritmos de narración, pudiendo pasar de la tranquilidad más absoluta a la acción más acelerada. Eso sí, desde que comienza hasta que finaliza la historia, nos perseguirá en todo momento, una inquietud total.
En cuanto al dibujo por parte de
Hernández, solo podemos decir que ha sabido plasmar, totalmente lo que
El Torres quería contar. Su dibujo oscuro y sucio (en el sentido del ambiente), es la clave para que se desarrolle esta historia de terror. Los escenarios y los fondos son de película. Se nota que hay un gran trabajo de documentación detrás. Le saca todo el partido a las expresiones de sus personajes, clave también a la hora de transmitir sensaciones al lector. Y la gama de colores, está elegida magistralmente. No veremos un cómic preciosista, sino con un toque inquietante, oscuro, disperso, difuminado y genial.
Un cómic que ha cosechado su éxito por méritos propios y que recomendamos totalmente, pues la historia y su dibujo, merecen un hueco en vuestra estantería. Eso sí, para los que seáis de susto fácil, leer de día.
Para terminar hay que decir, que para los que somos de pueblo, coincidimos con
El Torres (a la izquierda en la foto junto a
Raúl), en que siempre que vuelves a tu población, hay una cordialidad inquietante. Una cordialidad que se torna en oscuridad, no por muertos ni visiones, pero si por chismes y habladurías, que pueden llegar a ser nefastas. Puede considerarse también un guiño a la realidad que tenemos.
Por Raúl Cordero
Título: El Velo
Autor: El Torres y Gabriel Hernández
Editorial: Dibbuks (2010)
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.