"ESTA PELEA LA HE VISTO ANTES"
¿De qué va?
Adonis Johnson es el hijo que Apollo Creed nunca conoció. Sin embargo, sigue sus pasos con el apellido de la madre para no hacerse notar. Para llegar a lo más alto, intentará convencer a Rocky Balboa para su entrenamiento.
Reparto
Sylvester Stallone es Rocky Balboa
Michael B. Jordan es Adonis Johnson
Tessa Thompson es Bianca
Phylicia Rashad es Mary Anne Creed
Dirección
Ryan Coogler (Fruitvale Station)
Impresiones
Titulada originalmente como Creed y en España con el sobrenombre de La leyenda de Rocky con el único afán de poder venderla, puedo decir tras verla que tenían que haberla llamado directamente Rocky VII. Sí, Sylvester Stallone es el legítimo protagonista de ésta cinta por mucho que las críticas lo señalen como secundario y con el beneplácito de muchos para obtener la ansiada estatuilla, esa con la que tuvo su oportunidad hace casi cuarenta años por su primer Rocky -ganó su guion- pero que no consiguió. ¿Lo merece? En absoluto.
Ryan Coogler ha querido alargar la existencia de éste personaje intentando darle una nueva vuelta de tuerca que al final acaba en lo mismo de siempre, más cercana al Rocky V que a la primera entrega con la que se le quiere rendir homenaje. Tras ver ésta, nos damos cuenta que la "jubilación" de Rocky fue prematura en la quinta y peor entrega de la saga donde acababa entrenando a un chico que finalmente le volvía la espalda y para darle algo de vidilla al producto, al final acaban enzarzados en una pelea callejera. En Creed, Rocky entrena al chico y de la noche a la mañana, tras ganar un combate menor, se preparan los números y fechas para un combate contra el vigente campeón -más ficción que nunca-.
Tenemos ante nosotros dos horas y cuarto de auténtico suplicio. Su primera mitad es simplemente aburrida y para colmo tenemos a Michael B. Jordan, un actor de morritos que trata de despuntar como puede y no encuentra su sitio por mucho que intente curtirse físicamente. Cualquier actor que pongas a su lado se lo come, y por eso Stallone se acentúa aún más sin ser una de sus mejores interpretaciones. -A partir de aquí vienen Spoilers- ¿O es que por llevar al personaje a un estado de enfermedad ya tenemos que darle el Oscar? ¿Volvemos al principio de la academia donde siempre hay que premiar al enfermo? Si es por esa razón, es probable que se lo lleve. Si es por su actuación, evidentemente no. En su anterior entrega de la saga Rocky Balboa (Rocky VI), estaba muchísimo mejor. A favor y como curiosidad hay que alabar esa escena de la primera pelea que entrena Rocky, donde tenemos un curioso plano secuencia muy cuidado con una coreografía milimetrada.
Y es que el patetismo se hace patente cuando el tópico se engrandece pero de forma cutre. Tan solo ese momento de carrera de Creed rodeado de motos y quads es horripilante, incluso tratando de ponerle una variación del tema principal de Rocky para resultar "épico". Y si ésta película no se llama Rocky, no le pongas su música, lo siento pero no. No resulta nada original. Para colmo, el personaje de Stallone enferma y no tiene nadie a su lado, ni su hijo con el que quedó tan bien en el anterior entrega. Si ya lo dice Rocky en la película mientras come con el personaje de B. Jordan, "Ésta pelea la he visto antes". Sí, nada nuevo, actuaciones justitas, un exceso de humor senil que no acompaña, una banda sonora que trata de auto-copiarse, una actriz que hace playback de canciones infumables y a la esposa de "Bill Cosby" en la serie de los ochenta, que se conserva muy bien. Dos horas y diez minutos de sopor que no tienen sentido en las nominaciones y premios de las grandes galas de final de año. ★★★★★
Por Dante Martín
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.