"ES TU ÚLTIMA ACTUACIÓN. TAMBIÉN TU SALVACIÓN"
◘ ¿De qué va?
Robin es una actriz cuarentona. La era ha evolucionado hasta tal extremo que muchos actores son digitalizados, por lo que le proponen a ella un contrato para que deje de trabajar y sea digitalizada de forma que siempre aparezca joven en las películas.
◘ Actores
♦ Robin Wright (House of Cards) es Robin Wright
♦ Harvey Keitel (Pulp Fiction) es Al
♦ Danny Huston (30 días de oscuridad) es Jeff
♦ Michael Stahl-David (Monstruoso) es Steve
♦ Paul Giamatti (Entre copas) es el doctor Barker
♦ Jon Hamm (Mad Men) es Dylan (voz)
♦ Kodi Smit-McPhee (The road) es Aaron Wright
♦ Sami Gayle (Detachment) es Sarah Wright
◘ Impresiones
Ari Folman, el director de la brillante Vals con Bashir, nos deleita una vez mas con un film delicado, atractivo y que formará parte de la filmografía selecta de los mas cinéfilos. Hablamos de The Congress, una cinta hermosa tanto en contenido como visualmente. El género de ésta historia se aleja al de la anterior película de Folman que como sabemos se basaba en la guerra. Aquí hay un alto contenido de ciencia ficción, con una base dramática muy profunda. Bien es cierto que se podría dividir en dos bloques. El primero sería la historia de como Robin piensa y accede a ese proceso para convertirse en inmortal de cara a la pantalla. El segundo ocurre veinte años después y forma parte de la mas pura ciencia ficción al entrar en un mundo animado del que difícilmente hay escape.
Robin Wright ejerce de ella misma, dándole así un punto de realismo a esa vivencia y reflejo de muchos actores con una edad "mayor" para la pantalla y que ven con mas dificultad su continuidad en el medio. La escena en la que se ve en el póster de
La princesa prometida, cinta del año 1987 y donde guarda una belleza juvenil sin precedentes, es uno de esos momentos de afección en los que uno se da cuenta de lo rápido que pasa el tiempo. No obstante, diremos a su favor que
Robin Wright, la que llevó durante mucho tiempo el apellido de
Sean Penn, tiene ahora una belleza sin igual, madura y pasmosa, como podemos comprobar en la serie
House of Cards o en la reciente película de amores juveniles y maduros,
Adore (Dos madres perfectas). Junto a ella, tenemos unos papeles de aplauso como son los de
Danny Huston o
Harvey Keitel mismamente.
La historia que le cuenta éste último a Robin mientras está en el digitalizador, es digna de un maestro, repleta de alborozo y llanto a su vez.
Huston por su parte ejerce del magnate, director de la empresa Miramount (guiño a
Paramount) que tiene el rol de tirano. Buenísima su palabrería cuando dice
"¿Quien se ha leído el señor de los anillos? La gente va a ver la película porque no entiende el libro!!". De la misma forma hay que destacar la mención de
Keitel cuando le da a entender a Robin que uno de los primeros actores digitalizados hoy es
Keanu Reeves... no le falta razón, cada día está mas joven.
Sin embargo, fuera de ésto, y analizando brevemente la primera parte de la película, obtenemos una historia que tiene una derivación con respecto al hijo de Robin, Aaron. Sufre de sordera y según su doctor (que es quien tiene la clave de la película), interpretado por el brillante Paul Giamatti, éste tiene el don de modificar las palabras en milésimas de segundo, algo que de cara al futuro será de una fuente vital para plasmarlo en el sistema moderno y ser usado en otros medios. Ésta evolución la veremos veinte años después, pero sin trasladarnos aun a ese tiempo, diremos que el niño es el único aliento de la madre y la estabilidad de la misma para pisar con pie firme, por lo que le será de vital importancia para regresar mas adelante de aquel universo del que hablaremos ahora.
Veinte años después, llegamos a
una amalgama visual muy psicodélica. Con cierto estilo en el dibujo a los cartoon de los años veinte o treinta, se mezcla lo imposible con la ciencia ficción. Una ampolla de los estudios de Nagasaki los "convierte" o mas bien los hace ver que están en un mundo animado, privado. Ahí es cuando se cita el Congreso, una zona restringida para la animación. Robin acude para tener una charla con su director, Jeff, para cederle todos sus derechos y que así puedan usar su imagen al libre albedrío. Las ampollas, crean la posibilidad de poder cambiar o imitar al personaje que quieran. De ahí que en la cinta veamos un sinfín de caras conocidas que van desde
Grace Jones, Michael Jackson, Yoko Ono, David Bowie, Ali y cientos mas. Tanto es así que en la fila de delante mientras veía la película, había tres "cotorras" que se tiraron casi todo el tiempo buscando caras conocidas y señalando a la pantalla como si buscaran a Wally. Claro está, que eso lo hacían por el aburrimiento, y es comprensible. Ésta no es una película para todos los gustos y me causa una ligera sensación a la que viví cuando fui a ver
El Arbol de la Vida, donde la gente salía casi huyendo al no saber donde se habían metido y ver semejante obra maestra, inentendible para muchos. En
The Congress ésto ocurrió a un menor nivel, todo hay que decirlo. Pero de la misma forma, no es una cinta para cualquiera por el simple hecho de tener animación. El anterior film de
Folman que es totalmente animado es un claro ejemplo de ello.
Hay muchos que se pierden en éste segundo bloque. Es comprensible, la cinta parece ir por otras vertientes a la primera, pero con un poco de atención, seremos capaces de comprender el mensaje real de ésta historia. Si en la primera mitad hablábamos de ese retiro de muchos actores y del desprecio al que se ven sometidos, en ésta tenemos un claro resultado al que muchos se ven "obligados" queriendo o sin querer. Nos referimos a la adicción a la droga. En la cinta son ampollas que se inhalan, pero es todo una imagen simbólica para mostrar la tristeza de muchos y probablemente la soledad. La psicodelia que rodea a toda esa imaginativa animación no es otra cosa que la muestra del deterioro interno. ¿Como lo sabemos? La madre deja a su hijo en casa y se va elegantemente al congreso. Cuando comienza la animación hasta llegar al tramo final, parece que pasa un suspiro, sin embargo, ha pasado mucho tiempo ya que al regresar, se da cuenta de que su hijo la estuvo esperando mucho tiempo hasta que se marchó. Ella regresa como una pobre al mundo real, sucia y demacrada y es entonces cuando el doctor Barker le cuenta todo lo ocurrido.
Hasta aquí obtenemos la base principal de la historia, su cometido y lo que nos quiere dar a entender todo aquel movimiento en referencia a la degeneración y desprecio del olvidado actor/actriz por parte de la industria. Nos queda la otra vertiente, que es la razón por la que Robin se siente con los pies en la tierra, su hijo ahora perdido en aquel mundo fantasioso. El doctor nuevamente tiene la clave. "Es imposible que lo encuentres". ¿Porqué? Es la ampolla, la droga, lo que hace que imagines y veas lo que tu mente quiere. Encontrarlo sería solo una vana ilusión. No obstante, ella recurre a ello, y de una forma elengantísima, Folman nos ilustra como Robin se convierte en su hijo para dar con él, preparando su gran avión, siendo un hermano Wright, su mayor ilusión. De ésta forma feliz acaba The Congress, resultando otra respuesta clara, y mas triste que la reflejada en la imagen final en el encuentro. Nunca se llegaron a encontrar, ambos acabaron perdidos en el mundo de la pobreza, dando paso a la libre imaginación, la psicodelia y la felicidad mental, para acabar seguramente como la chica de color que Robin se encontró en un callejón...
Ésta es nuestra reflexión de The Congress, la que se ha convertido en nuestra película favorita del 2013 y a modo personal del que escribe ésta crítica, en toda una obra maestra. Me ha hecho falta un par de días para madurarla mentalmente, pero éstas son precisamente las películas que merecen la pena, las que te hacen pensar constantemente. Probablemente sea la última obra maestra desde El Árbol de la vida. Es una cinta peculiar, diferente y hermosa. Es lógico que muchos no le encuentren sentido, pero pensemos que ésta obra está basada en un libro de Stanislaw Len (Solaris), por lo que la complejidad está servida. No obstante, si tras ésto pensáis leeros el libro, que estáis en vuestro derecho, os avisaré de que Folman ha hecho un adaptación muy libre para su historia, la cual ha guionizado él mismo. Solo con leer la sinopsis del libro de Lem os daréis cuenta de los cambios aunque la base en cierta manera sea la misma. En resumidas, una obra maestra que de seguro será mayor con un visionado y que requiere concentración y sobretodo pasión por la ciencia ficción. Un aplauso para Folman por su riesgo y otro enorme para el compendio de actores que está impecables.
◘ BSO
Y por supuesto, otro aplauso enorme para Max Richter, el compositor de la banda sonora quien se supera en cada trabajo y nos regala joyas al oído. Tras trabajos brillantes en otras bandas sonoras como Perfect Sense (mi favorita) o Waltz with Bashir o incluso la re-composición de las cuatro estaciones de Vivaldi, con The Congress vuelve una vez mas a sorprendernos. Crea a la perfección sonidos oníricos que encajan en las imágenes e incluso colabora con la propia Robin Wright en dos temas vocales donde nos descubrimos ante ella para agradecerle ese Forever Young que nos ha brindado. En resumidas, una banda sonora perfecta para una película perfecta. Disfrutad de algunos cortes.
Beginning and Ending
Winterreise
All your Joys, all your Pain
Forever Young
•Lo Mejor: Absolutamente TODO
•Lo Peor: Absolutamente NADA
•Calificación: 11/10
Amante del séptimo arte y en especial de la ciencia ficción. Fan incondicional de Stanley Kubrick y Terrence Malick, pero con todo y con eso, soy capaz de disfrutar en colorines de cintas de dudosa reputación. Cantante en mis tiempos libres y apasionado del mundo del cómic. Eso si, siempre con una birra cerca.